Maxi Gómez, en la órbita del futbol chino por 20 millones

Maxi Gómez celebrando un gol con el Celta. RC Celta.

A pesar de llevar poco más de cinco meses vistiendo la elástica celeste, a Maxi Gómez ya le han salido muchas novias. El ariete uruguayo, autor de seis goles en diez partidos con el Celta de Vigo, es una de las revelaciones en lo que va de liga. Su rendimiento ha llamado la atención de diversos clubes, especialmente del fútbol chino, que está dispuesto a convertir al charrúa en el jugador joven mejor pagado del mundo. La operación dejaría entre 20 y 25 millones en las arcas celtiñas, una cifra irrechazable para un jugador que llegó en verano por cuatro kilos.

La mareante oferta permitiría al conjunto dirigido por Unzué lanzarse en el mercado invernal por un par de jugadores de garantías que suplan al nueve y que fortalezcan otras líneas del esquema vigués. Con todo, la operación aunque encarrilada, no es definitiva, ya que la decisión de abandonar la ciudad olívica recae ahora en los hombros del joven punta uruguayo, que debe sopesar los pros y contras de la oferta.

Por un lado, aunque se desconoce la identidad del equipo que negocia con la escuadra gallega, su llegada al gigante asiático sería en condición de estrella a una liga en franco crecimiento. Además, multiplicaría exponencialmente el sueldo que recibe en la Ría de Vigo. Desde el entorno del jugador le aconsejan que aproveche esta oportunidad, ya que es un tren que se presenta muy pocas veces.

En cambio, Maxi se siente muy a gusto en la ciudad y en el club, donde ha caído de pie demostrando un olfato goleador sobresaliente. Otro aspecto a tener en cuenta sería un cambio de cultura brutal, lo que podría afectar a la adaptación del joven delantero centro de 21 años. Además, y puede que este sea el motivo que más pese, esta temporada es año de Mundial, y salir del futbol europeo y de una de las mejores ligas del mundo podría cortar su progresión y perder su sitio en una Selección Uruguaya en la que hizo su debut en las últimas fechas.

Con todo, la venta del charrúa no dejaría la totalidad del dinero cobrado en Balaidos, ya que su club de origen, Defensor Sporting, percibiría una cantidad cercana a los 4 o 6 millones de euros. Esto se debe a que el club uruguayo estipuló en el contrato con el Celta que percibiría un 20% de una futura venta. A pesar de eso, su marcha supondría un negocio redondo para los celestes, siendo una venta record en el club superando los 16 millones ingresados en la venta de Nolito al City. Además, la operación beneficiaria colateralmente a John Guidetti, que hace una semana pedía más minutos en Vigo o que le dejasen irse en enero, y a Borja Iglesias, cedido en el Real Zaragoza y al que la marcha del uruguayo podría motivar su regreso a Balaidos en navidad para demostrar su pericia goleadora.

Ahora todo queda en manos de Maxi, que tendrá que pensarse bien si cae seducido ante los cantos de sirena del fútbol chino o prefiere vivir el prometedor presente que le ofrece el Celta de Vigo. La decisión está en la botas del charrúa, y solo él y el tiempo podrán decidir si el uruguayo tomó el camino correcto o no. Tic-tac, tic-tac…