Campaña de denuncia y movilización contra la discriminación laboral de las mujeres
jueves, 5 de julio de 2018, 13:41
La Secretaría das Mulleres de la Confederación Intersindical Galega presentó este jueves una campaña para "visibilizar, denunciar, sensibilizar y combatir las discriminaciones que sufren las mujeres, por el hecho de serlo, en el mundo del trabajo". Así explicó la secretaria de la sección, Margarida Corral, el plan que inician bajo el lema "Xa é hora de avanzar nos nosos dereitos".
"Lanzamos esta campaña conscientes de la necesidad de luchar contra las diferencias salariales, contra el desempleo, contra la minusvalorización de los trabajos feminizados, contra la problemática derivada de los cuidados (dentro y fuera del hogar), contra los salarios de miseria, contra la precariedad, la eventualidad, las jornadas parciales, el acoso machista", explicó Corral en rueda de prensa.
La Secretaria de Mulleres explicó que cada denuncia de una situación de desigualdad se acompañará con movilizaciones "para que trasciendan socialmente". Avanzó que el próximo 11 de julio han previsto la primera de las concentraciones delante la fábrica de Citröen de Vigo, al haber "vulnerado derechos fundamentales" con el último acuerdo sobre sistemas de organización en casos de reducción de jornada. Desde el sindicato consideran que la decisión de la empresa imposibilita una concreción de jornada laboral flexible y, por ende, la conciliación.
Margarida Corral destacó otros casos de empresas privadas como UNISONO, empresa denunciada por denegar solicitudes de reducción de jornada por guardia legal; Froiz, con varias denegaciones de fin de reducción de jornada; Inditex, que "deniega la mayor parte de las solicitudes de concreciones horarias de las reducciones de jornada"; Pescanova, que "niega el derecho a la concreción horaria" al personal con hijas o hijos menores de 12 años; o grupo Norte, donde las trabajadoras llevan semanas protestando.
Adviertió también de que la discriminación no se produce sólo en empresas privadas, y ejemplificó el caso del Sergas, que "sólo acepta reducciones de un tercio o media jornada".