Golpe de efecto de Pedro Sánchez. A pocas horas de la manifestación de PP y Ciudadanos contra el relator, el gobierno de España abandona la negociación con los independentistas. La derecha se queda sin relator que enarbolar y el PSOE, al no poder aprobar presupuestos, convocará elecciones este año. Si las hace coincidir con las locales y europeas, habrá un superdomingo electoral, algo que pone muy nervioso a muchos candidatos a alcaldes socialistas.


La vicepresidenta del Gobierno y ministra de Igualdad, Carmen Calvo, ha anunciado que los partidos independentistas no aceptan el marco trazado por el Gobierno central para Catalunya.



"Este gobierno tiene la firme decisión de establecer todos los puentes posibles pero en este momento, el marco trazado que hemos hecho no es aceptado por los partidos independentistas", ha asegurado en rueda de prensa tras la reunión del Consejo de Ministros.


La vicepresidenta ha dicho que no tira adelante la mesa de partidos que se pactó el 20 de diciembre del año pasado por los presidentes del Gobierno, Pedro Sánchez, y de la Generaltiat, Quim Torra.


Calvo ha destacado que la Constitución debe respetarse y ha rechazado cualquier voluntad de autodeterminación: "Este gobierno no aceptará nunca el planteamiento de un referéndum de autodeterminación".


Estas declaraciones se hacen en paralelo a las enmiendas a los Presupuestos Generales del Estado, y en una semana marcada por la polémica sobre si es necesaria o no la figura de un relator en la mesa de partidos para dialogar sobre la situación de Catalunya.


EL GOVERN ACUSA A SÁNCHEZ DE "ROMPER EL DIÁLOGO"


En una comparecencia conjunta de Elsa Artadi y Pere Aragonès en reacción a las palabras de Calvo, el Gobierno ha acusado a Sánchez de "falta de coraje" ante las presiones de la oposición. "Lamentamos que el Estado haya decidido abandonar el diálogo, que el PSOE haya cedido ante los que están en contra de la democracia, del diálogo y de hacer política. Un Gobierno que ha hablado de respuesta política a problemas políticos pero a la hora de hacer efectivo el diálogo y concretar está fallando", ha dicho Artadi.




Por Pere Aragonès, el Gobierno  "ha renunciado al diálogo" y dice que desde el Ejecutivo catalán se continuará apostando por el diálogo pero, eso sí, sin renunciar a su proyecto político independentista.

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