Serán "eje transversal" de la nueva etapa, en la que la presidenta confía en "mejorar las relaciones con la Xunta"
La presidenta de la Diputación de Pontevedra, Carmela Silva, ha tomado posesión del cargo por segundo mandato consecutivo instando a otras Administraciones a aplicar el modelo de "equidad, transparencia y reparto objetivo de fondos" implantado por el organismo provincial. "Que actúen como nosotros", ha afirmado en su discurso tras la votación en la que ha contado con los votos a favor de su partido, el PSdeG, y el BNG, con el que gobernará en coalición durante los próximos cuatro años.
También ha apostado por "el diálogo y el consenso, poniendo por encima el interés general", en tanto el proyecto que encabeza está "abierto a escuchar a la gente". "Y cuando no podamos coincidir, atender, explicar, dialogar y consensuar", ha señalado, tanto con agentes sociales y económicos, como los ayuntamientos y la ciudadanía a nivel individual o formando parte de colectivos.
Silva ha insistido en que "los grupos de progreso tienen más fuerza y más legitimación", en base a la mayoría absoluta de los socialistas, reforzada con el apoyo de los nacionalistas, con los que va a "seguir siendo un gobierno único" como en los últimos cuatro años.
Así, al presentar su candidatura a la presidencia de la Diputación -la única que se ha votado, puesto que el PP ha renunciado a formularla-, Silva ha comenzado su primera intervención recordando que el balance del anterior mandato provincial ha sido "ratificado en las urnas y allá quien no sea capaz de analizar la realidad del 26 de mayo", fecha en la que se celebraron las elecciones municipales.
Al prometer su cargo, Carmela Silva ha personalizado la fórmula legal destacando su compromiso en "defender los derechos de las personas y particularmente de las mujeres".
En este sentido, entre los ejes que marcarán la gestión de la Diputación de Pontevedra hasta 2023 ha citado la "igualdad" como la primera línea de acción, garantizando que no se dará "ni un paso atrás en la lucha de las mujeres" y que tanto PSdeG como BNG estarán "vigilantes" e incrementarán estas políticas como "eje transversal, global y prioritario" que "consolide" al organismo provincial "como referencia en Galicia y a nivel nacional e internacional".
Además, se ha dirigido al colectivo LGTBIQ "contando con ellos contra la discriminación y contra los discursos fascistas que se quieren instalar en nuestro país", ha añadido Silva, que también ha expresado el apoyo de la Diputación de Pontevedra a la "diversidad" y a las personas con disfuncionalidad física, psíquica y sensorial.
En un discurso con abundantes citas de personalidades no solo del ámbito del feminismo, sino también del ámbito de la pedagogía o de los derechos humanos, Carmela Silva también ha resaltado que "la agenda medioambiental y la transición ecológica" será otro "eje transversal" de trabajo, con la puesta en marcha de un "proyecto global y muy potente con el medioambiente, que se pactará con los ayuntamientos" para que estos también se adhieran.
MEDIO AMBIENTE
Así, la eficiencia energética, el compostaje, la recuperación de los espacios públicos "para las personas" han sido algunos de los aspectos que abordará ese modelo, argumentando que "estamos ante un punto de inflexión sin precedentes" en relación al "imparable cambio climático" y el "daño irremediable" que está afectando al planeta.
En el terreno de la movilidad, Carmela Silva se ha referido a las medidas de seguridad vial y accesibilidad, además de "avanzar en la concienciación sobre las emisiones y apostar por restricciones muy serias". En esta línea, ha instado a implementar un "cambio urgente de paradigma urbano", también hacia el turismo, y "poner todo el empeño en ser una provincia sostenible que favorezca el empleo de calidad, el respeto al medio ambiente y los recursos naturales".
Precisamente, en el ámbito económico ha anunciado el desarrollo de un "área potente de captación de recursos europeos", el incremento en las políticas de formación en colaboraboración con la Universidade de Vigo, para lo que se van a "explorar nuevas vías de acuerdo", y el impulso de un modelo de contratación "que beneficie a las pequeñas y medianas empresas asentadas en la provincia", priorizando aquellas donde haya "modelos dignos" a nivel laboral.
Por otra parte, se ha referido a la necesidad de adoptar medidas contra la despoblación en una provincia donde el 29% de la población tiene más de 60 años y solo el 17 por ciento está por debajo de los 20. "No podemos permitirnos perder esta savia nueva de nuestro futuro", ha afirmado, sobre el "saldo migratorio negativo" que afecta a Pontevedra, para lo que también aplicará "nuevas políticas" que eviten que los jóvenes se vean "abocados a la emigración".
RELACIONES CON LA XUNTA
"Quiero pensar que van a mejorar las relaciones con la Xunta, que las cosas van a cambiar y vamos a sentarnos a hablar con lealtad institucional", ha explicado la presidenta de la Diputación sobre la relación con el Gobierno gallego.
Así, ha recordado que el organismo provincial está asumiendo "competencias impropias" en la gestión del Centro Príncipe Felipe, el laboratorio de Mouriscade, la finca de Areeiro o el campamento de A Lanzada, que cuestan a las arcas provinciales 22 millones de su presupuesto "que no se pueden dedicar a cosas de su competencia y a llegar a los ayuntamientos".
Además, Carmela Silva ha reivindicado el "cambio de 180 grados" experimentado por la Diputación en áreas como el 'Plan Concellos', argumentando que "en cuatro años no hubo obra, dotación o servicio que no tuviese el sello de la Diputación, ni alcalde que no reconozca la justicia del sistema, sin amiguismos ni discrecionalidad".
Por ello, se ha dirigido al diputado provincial del PP, Jorge Cubela, que ha actuado como portavoz de su grupo, para asegurar que el objetivo del Gobierno provincial es "crear riqueza y favorecer el desarrollo de todos los ayuntamientos". Previamente, éste había tomado la palabra para reclamar "renovación en el fondo y la forma" y para ofrecer la "mano tendida para la nueva etapa: trato igual, cooperación institucional y debate abierto".
Con varios alcaldes del PP presentes entre el público que ha seguido el acto, el diputado popular y regidor de Cerdedo-Cotobade ha recordado que su partido tiene "más alcaldías, más concejales y más mayorías absolutas", además de representantes provinciales en los partidos judiciales, por lo que ha apelado a la "legitimidad" del PP desde la oposición para "trabajar por la provincia sin personalismos".
Por su parte, el diputado del BNG César Mosquera, que seguirá como vicepresidente, se ha referido a la Diputación como una institución "bastante disfuncional" y sujeta a un "mecanismo perverso" en tanto "no tiene obligaciones" y contribuye a agravar el "desequilibrio territorial".
"Cada vez me reafirmo más en que las diputaciones son un trasto anacrónico de fatal encaje en la arquitectura del Estado español", ha dicho, por lo que ha apostado por "corregir" sus deficiencias a través de la gestión.
En la toma de posesión de sus cargos, los diputados del PP han optado por la fórmula del juramento, mientras que socialistas y nacionalistas lo han prometido: en el caso de César Mosquera, apelando a los "derechos nacionales de Galiza" y su homóloga Remedios Ortega, "por imperativo legal".
Entre las anécdotas del acto, han destacado la emoción de María Isaura Abelairas al proclamar presidenta a Carmela Silva, y esta misma al saludar a su madre y a su hijo, el futbolista Iago Falque, que acudía por primera vez a la toma de posesión de su madre.
Junto a el, uno de los representantes políticos destacados ha sido el secretario xeral del PSdeG, Gonzalo Caballero, además del diputado socialista Guillermo Meijón y representantes del ámbito judicial y del estamento militar.
miércoles, 3 de julio de 2019, 17:33