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La Confederación Intersindical Galega (CIG) ha denunciado que el Hospital Povisa ha ordenado a sus empleados "reducir" las actuaciones a pacientes del Sergas, mientras que la Consellería de Sanidade ha asegurado que realiza un "seguimiento" de la actividad asistencial prestada en este centro privado.

A través de un comunicado, el sindicato ha afirmado que el hospital ha achacado las pérdidas registradas en 2018 al concierto con el Sergas, por lo que, para 2019, ha marcado como objetivo "reducir" las actuaciones en pacientes del servicio sanitario público "que no les aporten ningún valor añadido". Además, ha llamado a "aprovechar esa liberación de recursos" para mejorar el "tiempo de respuesta" a los demás pacientes.

Ante esta situación, la CIG ha advertido de que estas directrices conllevan que se realizaban actuaciones no necesarias "con el consiguiente incremento del riesgo de efectos secundarios". También ha apuntado que la otra opción es que el centro busque "modificar" los criterios científicos en los que se basan las consultas para reducir las intervenciones e incrementar los beneficios y la actividad de la atención sanitaria privada.

A este respecto, la Consellería de Sanidade ha insistido en que se realiza un seguimiento semanal de la actividad asistencial quirúrgica, de pruebas dignósticas y de consultas para garantizar el "cumplimiento" de los objetivos fijados en los acuerdos firmados con el hospital vigués.

Además, ha detallado que, cada semana, se analiza el número de pacientes que esperan por una intervención o una consulta, así como que estas actuaciones se priorizan de acuerdo con la patología que padezcan.

En este sentido, ha remarcado que el Sergas firma cada año un acuerdo con el Hospital Povisa en virtud del que se definen los objetivos de demoras y la priorización de la asistencia, así como los relacionados con la efectividad, la seguridad y la calidad del servicio.

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