Cinco pacientes del área de Oncología del Hospital Provincial de Pontevedra y un residente permanecen en cuarentena después de detectar un brote.
Esta situación ha provocado que el complejo hospitalario sea más estricto en cuanto a las limitaciones ya existentes por mor de la pandemia, por lo que ha decidido restringir las visitas. Además, una enfermera denuncia que desde el departamento de Medicina Preventiva la instaron a "ignorar" los resultados positivos de un test rápido que le realizaron y que volviese a trabajar en el área de Tratamiento Oncológico.
Las primeras pesquisas señalan a una acompañante de un paciente como primer transmisor de la enfermedad. La mujer, profesional sanitaria, dio positivo en coronavirus y se encuentra hospitalizada. Este hecho activó el protocolo preventivo y se realizó un cribado que arrojó los positivos que se conocen hasta la fecha, entre ellos el de un médico residente de la unidad.
Fuentes hospitalarias sostienen que los pacientes contagiados no presentan sintomatología de momento. Los casos positivos han sido trasladados al Hospital Montecelo y se ha procedido a la desinfección del área de Oncología, que sin embargo no ha visto frenada su labor asistencial.
Desde el centro hospitalario recalcan la necesidad de restringir "al máximo" las visitas, que el acompañante sea el mismo siempre que sea posible y que se limiten las interacciones dentro del hospital entre los acompañantes, así como en usar de forma correcta las mascarillas y demás material de protección.
"MEDIDAS OPORTUNAS"
Desde Sanidade, el conselleiro Julio García Comesaña sostiene que se tomaron las "medidas oportunas" tras detectarse el brote en Oncología, si bien admitió que no disponía de los datos de este brote.
Cuestionado sobre si mantiene la confianza en la gerencia de esta área sanitaria ha asegurado: "Sí, por supuesto". No obstante, a llevado la pelota al tejado de Medicina Preventiva, donde se continúa con análisis a pacientes y profesionales con el fin de "ver cómo se originó" y la "vía de contagio".
"IGNORA EL RESULTADO POSITIVO Y VUELVE AL TRABAJO"
Sin embargo, las explicaciones ofrecidas por Sanidade chocan con la historia que recoge hoy el diario Pontevedra Viva, en donde una enfermera que trabaja en el servicio de Tratamiento Oncológico del Hospital Provincial denuncia que desde Medicina Preventiva la instaron a “ignorar” los resultados positivos que arrojó el test rápido al que fue sometida junto a otros profesionales del servicio de Oncología el pasado 15 de octubre.
La enfermera subraya que nadie les notificó el resultado de los test y que durante el fin de semana trabajó en los PAC de Parda y Baltar, momento en el que ella misma consultó los resultados de su test en su historia clínica y comprobó que los anticuerpos eran positivos.
Al enterarse de los resultados, la profesional de enfermería contacta con su supervisor, que lo deriva a Medicina Preventiva, donde le comunican que al no autorizar ese departamento los test a los que fue sometida “de se desentienden de su caso” sin someterla a una prueba PCR u ordenarle que guarde cuarentena.
No obstante, la afectada les pone al corriente de su situación, de su papel en la unidad de Tratamientos de Oncología y su contacto con pacientes inmunodeprimidos, sugiriendo que no se presente a trabajar por precaución, a lo que desde Medicina Preventiva le sugieren que no debe “hacer caso” a los resultados del test rápido “y que vaya a trabajar porque hay mucho falso positivo”.
La enfermera, según relata, se niega y consigue que le hagan una prueba PCR tras un largo tira y afloja. Finalmente la PCR arrojó un resultado negativo, si bien desde la dirección la instaron a mantener su cuarentena hasta realizar una nueva PCR.
La profesional afectada tacha de “nefasto” el procedimiento y recalca la “falta de coordinación” existente en el complejo hospitalario. Por otro lado, cuestiona quién pudo dar la orden para realizar los test rápidos y los motivos por los que los resultados de estos test no fueron trasladados a los profesionales sanitarios. “Tal vez hay gente que es positiva y nadie se lo comunica, por lo que está contagiando”, incide.