La anterior directivo del Lugo dejó blindados los contratos de 5 técnicos por valor de 700.000 euros, tanto si se les mantiene como si se opta por el despido. Y solo le queda emprendan acciones judiciales para determinar la legalidad de este blindaje como recomiendan sus auditores .


Las dudas de que esos contratos fuesen realizados realmente en las fechas que tienen surgen porque no todos tenían necesidad de renovación en aquel momento, ni las circunstancias de cada uno eran las mismas. El más gravoso es el contrato de Carlos Mouriz, de 180.000 euros para esta temporada y otro tanto para la próxima, y un finiquito de 72.000. Un total de 420.000 euros que habrá que pagarle tanto si se queda como si se le despide en cualquier momento.

Los contratos blindados de los otros cuatro técnicos sumarían 284.000 euros. Oscilan entre los 104.000 euros por las dos temporadas y los 60.000 euros, y en todos los casos, también la indemnización debe ser pagada íntegra independientemente de cuando se realice el despido.

Los técnicos que tienen los contratos blindados se mostraron siempre a favor de la continuidad de Bouso y contra la entrada de Tino Saqués. Incluso el propio entrenador Quique Setién lo hizo público cuando el día 25 de abril participó junto a varios de ellos mostrando una pancarta en apoyo a Bouso, antes del partido contra el Alcorcón. 

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