El denunciante afirma que el suceso comenzó porque un miembro de seguridad le impidió bailar con otro muchacho. Según su relato, tanto él como su compañero de piso fueron agredidos físicamente por vigilantes de seguridad privada. 

 

Galiciapress trató de conocer la versión de los responsables del establecimiento, sin recibir respuesta hasta el momento. 

 

Entrada al Vanitas de Santiago en una imagen de Google Street View

En los últimos meses parece que se han recrudecido los casos de delitos de odio contra miembros de la comunidad LGTBIQ. Desde el propio colectivo reportan que cada vez son más los casos en los que sufren agresiones homófobas o transfóbicas, pero afortunadamente también son cada vez más los afectados que se deciden a denunciar. El último caso de una presunta agresión homófoba tuvo lugar el pasado fin de semana en una conocida discoteca de la 'zona nova' de Santiago de Compostela

 

El afectado, natural de México, denuncia que durante la madrugada del pasado miércoles, en la discoteca Vanitas -la antigua sala Apolo, reabierta y rebautizada este otoño-, sufrió una agresión homófoba por parte de uno de los miembros de seguridad del local, si bien hace extensible la denuncia a todo el equipo de seguridad del negocio por su supuesta inoperancia y participación en algunos casos.

 

"NO PODÍA BAILAR CON OTRO HOMBRE"

El joven se encontraba de fiesta con unos amigos, danzando en el mencionado local. En un momento de la fiesta, el denunciante dice que estaba bailando con otro muchacho en la pista, hasta que "un sujeto de los de seguridad llegó y me dijo que no podía estar haciendo eso, a lo que pregunte qué, y solo me dijo 'Eso que tú estás haciendo', en un tono muy pesado". "Estaba haciendo alusión a que no podía bailar con otro hombre", apunta. 

 

El chico, muy molesto por la actitud del empleado, fue a "reportar lo sucedido" al jefe de seguridad de Vanitas. "Le dije que lo único que pedía es que lo movieran de lugar o le pusieran un alto, a lo que solo se rió sarcásticamente y me dijo que no podía hacer nada". Al ver que no iba a recibir ninguna respuesta por parte del jefe de seguridad, el joven lo invitó a que lo acompañase al interior del recinto para poder indicarle cuál de todos los miembros de seguridad le había impedido bailar con otro chico. "Me insistió en que no podía hacer nada".

 

"ME SACÓ POR LA FUERZA, ME AGARRÓ POR EL CUELLO..."

"Me molesté mucho y bajé a por mi abrigo para irme del bar. Me despedí de mis amigos y el tipo estaba ahí y en mi enojo le dije 'Ojalá te despidan por homófobo', y caminé hacia las escaleras para salir", relata. Sin embargo, el interpelado agarró al joven por la espalda y lo "sacó a la fuerza por la puerta trasera, me apoyó contra la pared poniendo su manos en mi cuello con afán de asfixiarme"

 

En ese momento los amigos del joven trataron de auxiliarlo, pero no pudieron salir del local, salvo el compañero de piso del afectado. "En su intento de ayudarme alguien de seguridad lo golpeó en la cara. Me soltó del cuello el tipo de seguridad y otro de ellos se acercó y me gritó en tono amenazante que me fuese antes de que me agarrasen a golpes", indica. 

 

Ante las amenazas, el joven abandonó el lugar y pudo llegar a su piso ayudado por otras personas. "Lo hago público por el miedo que significa estar en otro país y no sentirte seguro por salir a bailar. Por mí y por otros Erasmus que solo quieren salir a divertirse". 

 

SILENCIO DE LA EMPRESA PERO PIDE DISCULPAS AL DENUNCIANTE

Galiciapress trató, sin éxito, de ponerse en contacto con el local para conocer su versión de los hechos. Hasta la fecha, los mensajes enviados al negocio no han recibido respuesta. Eso sí, en declaraciones a Quincemil, el joven sostiene que la discoteca se puso en contacto con él pidiéndole disculpas, anunciando que tomarán "medidas al respecto" y que "depurarán responsabilidades". 

 

El caso ya ha sido denunciado por el joven ante la Policía, tal y como le confirmó el agredido a este medio. Al tiempo, sobre el parte de lesiones, el afectado refiere "dolores internos" como consecuencia de la agresión.

 

 

 

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