La Xunta de Goberno del Ayuntamiento de Pontevedra ha concedido este lunes la última de las licencias de la nave de mayor superficie del Polígno Comercial do Vao, situado en la carretera de Vilagarcía, que acogerá las firmas Leroy Merlin, Decathlon, Eroski, Kiwoko y JYSK.
La portavoz del gobierno local, Anabel Gulías, ha informado en rueda de prensa de que la superficie edificable de uso comercial de este polígono está dividida en dos parcelas, una de 17.731 metros cuadrados (con edificabilidad de 15.587 metros cuadrados) y otra de 1.267 metros cuadrados (con edificabilidad de 964,81 metros cuadrados).
La superficie destinada a espacios libres y zonas verdes es de 4.406 metros cuadrados, y se reservan 462 plazas para estacionamientos que, junto con el viario, ocupa una superficie de 6.850 metros cuadrados. Además, cuenta con una parcela para equipamiento de 688 metros cuadrados, otra para cesión municipal de 1.758 metros cuadrados y otra cesión de parcela al Ministerio de Fomento para la autopista AP-9 de 3.915 metros cuadrados.
La nave de mayor volumen tendrá un coste de 3.512.532 euros y la licencia de la segunda nave, que ya fue concedida la pasada semana, estará ocupada por Norauto. El coste de construcción de esta nave es de 334.116 euros.
La empresa Ponteno, promotora del polígono, tiene un plazo de 6 meses para el inicio de la obra (6 meses de paralización, si fuera el caso) y 24 meses para la ejecución de todo el proyecto.
PARQUE EÓLICO DEL ACIBAL
En esta misma rueda de prensa, la portavoz del gobierno local también ha dado cuenta del informe elaborado por el departamento municipal de Medio Ambiente Natural, que ha sido remitido a la Xunta, para demandar garantías del suministro y de la calidad del agua del embalse de O Pontillón do Castro.
El ayuntamiento reclama garantías de que la instalación de los aerogeneradores del parque eólico del monte Acibal, situado en el nacimiento del río Rons, afluente del Lérez y una de las principales fuentes de abastecimiento del embalse de O Pontillón do Castro, no afecta al agua embalsada.
La portavoz del gobierno local ha reclacionado esta instalación con la licitación del contrato de energía de la ciudad, valorado en más de 5 millones de euros y que quedó desierto porque el porcentaje del 30% energía verde certificada que exigía el Ayuntamiento de Pontevedra en sus pliegos suponía un incremento "brutal" al respecto del actual contrato, pasando de 0,15 euros a más de 50 euros, según Anabel Gulías.
La portavoz ha recordado que "si las administraciones quieren trabajar con energía renovable, no puede ser a costa de la depredación de los recursos ni del bolsillo de los ciudadanos".