Hugo Rama | Foto: Real Oviedo

 

De menos a más, mucho más. Así se podría resumir la que está siendo hasta ahora la temporada de Hugo Rama, que el pasado enero cumplió su primer año en el Carlos Tartiere. El gallego llegó el año pasado al Real Oviedo con el objetivo de ser importante en el club asturiano, y después de un inicio titubeante ya podemos decir que el dorsal 20 es un habitual en los planes de Cervera, que por fin lo tiene como un elemento fundamental en su esquema.

 

PROGRESIÓN LENTA PERO SEGURA

No fue ni mucho menos fácil. El año pasado apenas sumó un puñado de minutos testimoniales, tal vez por la competencia o porque al llegar con la temporada iniciada y prácticamente sobre la campana necesitaba de un proceso de adaptación más largo de lo habitual, aunque pudo estrenarse como goleador con el cuadro carbayón. 

 

Sin embargo, la mala campaña del Oviedo arrastró a un Rama que había empezado siendo titular pero que poco a poco se fue diluyendo. El cambio de entrenador lo devolvían al punto de partida y con Cervera fue cobrando peso y sumando más y más minutos de calidad. No obstante, el rumbo del equipo seguía sin ser el ideal, por lo que el rendimiento de Rama se resintió. Tanto, que en enero perdió por completo su presencia en las alineaciones por una lesión que lo tuvo sin jugar hasta bien entrado febrero. 

 

AL ENGANCHE

El 10 de marzo recuperó la titularidad y no la ha soltado, aunque el Oviedo sigue sin ver portería con la contiunuidad deseada. Rama no se ha estrenado este curso y en el Tartiere suspiran por sus goles. Consciente de esa responsabilidad que le ha dado el técnico al colocarlo en la posición del 10, recoge el guante: "Las sensaciones antes igual eran de que no llegábamos, que no las creábamos. Ahora sí y eso para nuestro estado anímico y para nuestra cabeza nos hace mejorar. Sabemos que estamos haciendo las cosas bien, pero hay que aprovechar las ocasiones porque si no te pasa como el otro día". 

 

Tras sufrir un duro golpe en Granada, Rama se agarra a que otro regreso como el de Borja Bastón, que también ha sufrido lesiones este 2023, pueda darles un plus de cara a puerta, además de su buen hacer actuando como enganche. Con todo, sabe que la mejor arma del Oviedo es su parroquia, que este fin de semana soplará las velas por el 97 cumpleaños de la entidad, cumplidos el domingo 26 de marzo. "Sabemos que no nos van a fallar. Que disfruten porque es un día especial para ellos y esperamos dedicarles la victoria", indicó. 

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