El Ayuntamiento de Ourense ha anunciado que iniciará los trámites burocráticos para eliminar todos los aparcamientos de pago en la zona azul de la ciudad, una supresión que requiere cambiar una ordenanza reguladora que el gobierno municipal espera llevar a aprobación a finales de este año para poder aplicarse en la próxima primavera.
Así lo han hecho saber desde el Consistorio mediante un comunicado en el que el alcalde, Gonzalo Pérez Jácome, explica los motivos para esta decisión.
En concreto, el regidor apunta que la zona azul comenzó hace más de tres décadas y llegó a tener más de 1.000 plazas de aparcamiento de las que en la actualidad quedan 744. Esta cifra se reduciría, según prevé, a 500 en un futuro próximo con la peatonalización de calles, el aumento de plazas de carga y descarga y aparcamientos exprés gratuitos, "que se implantarán en algunas zonas a modo de experiencia piloto".
Así pues, considera que debe suprimirse por "las complicaciones y las pocas ventajas" que presenta. Señala que el sistema proporcionaba "pocos ingresos" y además "no provoca rotación de vehículos" ya que, dice, aparca gente que está toda la mañana o toda la tarde completa.
El regidor añade que la idea es que circulen pocos coches por el centro, algo complicado con la zona azul "que produce tráfico de agitación de vehículos buscando donde estacionar". "Encima debe mantenerse el contrato con una empresa que se rescindiría ahorrando el consecuente pago concesional", esgrime el regidor ourensano.
Por todo ello, el gobierno municipal espera contar con el apoyo de los grupos municipales, aunque solo necesita una votación mayoritaria. De este modo, Jácome ha señalado directamente al PSOE y al BNG, valorando que "no se opondrán al cambio" ya que, ha recordado, "la única ciudad que gobierna el BNG, la de Pontevedra no tiene aparcamiento ORA" y tampoco "en la ciudad gemela de Ourense, Lugo, gobernada por el PSOE, donde se suprimió hace casi 10 años".
CARGA Y DESCARGA, CARGADORES Y VELADORES
Con estos cambios, la mayor parte de esas plazas de zona azul en el centro se sustituirían por zonas de carga y descarga donde los residentes podrán aparcar por la noche. También por aparcamientos de movilidad reducida, por cargadores de coches eléctricos y por espacios para contenedores e incluso veladores, según la pretensión del alcalde, que añade que en la zona alejadas del centro "será donde se aplique un programa piloto de aparcamiento exprés".
Para reducir el volumen de vehículos, el ayuntamiento impulsará además el transporte público con líneas de autobús operativas cuando se supriman estas plazas, ha prometido.
Por el momento ninguno de los partidos de la oposición se ha posicionado al respecto, tan solo el Partido Popular ha anunciado que es "una decisión unilateral" de la que "no tenían ninguna información" y ha avanzado que realizará un estudio de "viabilidad y consenso" para ver si sería una decisión acertada o no.