Si algo no le ha faltado al Celta de Vigo este pasado sábado, fue la afición que llenó Balaidos / Foto: @RCCelta

El Celta de Vigo comenzó este pasado sábado un partido en el que puso todas sus fuerzas. Supo contentese ante el Atlético de Madrid durante los primeros minutos, aunque eso no le fuese suficiente para vencer a su rival.

 

Tras algunos despistes defensivos por parte del conjunto madrileño, el celta no estuvo tampoco falto de ocasiones. Una parada de Iván Villar, del Atlético, un balón disparado por el Celta a córner y un fuera de juego de Morata marcaron un inicio tenso del partido. Pero el equipo vigués se vio desmoronado cuando cuando Griezmann marca un gol de penalti.

 

El Celta no levantó cabeza desde este primer gol del Atlético de Madrid, y es que a pesar de haber echo un buen juego el equipo olívico no tuvo suerte el resto del partido. Afortunadamente, no fue hasta la segunda parte cuando al Celta le metieron el segundo gol. Estuvo a punto, pero una parada de Guaita frenó un disparo a portería de Samu Lino.

 

La segunda parte siguió sin sonreír al Celta de Vigo. El Celta sigue intentándolo, pero su primer tiro a puerta termina contra el larguero. Poco después, en el minuto 64 del juego, Griezmann vuelve a alegrar a los 'colchoneros' con un segundo gol, tras un fuera de juego de Riquelme.

 

Y sin darle al Celta tiempo de asimilar la ventaja de su rival, Griezmann se marca un 'hat-trick' con el tercer gol del partido, que dejó al Celta ya con pocas posibilidades de remontar el juego. Sin embargo, durante los últimos minutos, el conjunto vigués supo contenerse y evitar más goles del Atlético.

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