La próxima madrugada se cumplen dos semanas de la desaparición de la joven madrileña Diana Quer, con pocas respuestas sobre las circunstancias en las que se produjo. Este domingo los voluntarios ya no participan en las batidas vecinales que se realizaron durante las últimas jornadas.

Suspendida esta parte del dispositivo, las sospechas apuntan a que la investigación lleva otro rumbo. Así, los agentes, al parecer, están llevando a cabo interrogatorios a personas cercanas a Diana tanto en Galicia como en Madrid. Paralelamente, están analizando distintos dispositivos electrónicos de la joven y no se descarta incluso que citen a declarar a su madre, tal y como sostienen distintos medios, a pesar de que la mujer estuvo colaborando desde un principio con la investigación.

Las pesquisas continúan bajo secreto de sumario y los progenitores han manifestado que no harán más declaraciones a los medios mientras no trasciendan más novedades.

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