El director xeral de Emerxencias e Interior, Santiago Villanueva, y el delegado territorial de la Xunta en Pontevedra, Agustín Reguera, han participado este viernes en un simulacro de Activación del Plan especial de Protección Civil ante emergencias por incendios forestales en Galicia (Peifoga) y su paso a situación 2 por un incendio de alta intensidad y con afectación a la población y viviendas.
En concreto, en este ejercicio desarrollado en Arbo (Pontevedra)se recreó una situación de emergencia similar a un incendio de 2016, que afectó a varias parroquias del entorno, con el objetivo de "evaluar la respuesta coordinada de los diferentes cuerpos y servicios aplicando los planes de emergencia correspondientes".
El simulacro comenzó a las 10,00 horas con la alerta inicial de un fuego en la parroquia de Mourentán y el escenario fue escalando desde las actuaciones iniciales del Peifoga hasta la declaración de situación operativa 2 "por el incremento del riesgo para personas y viviendas de los núcleos de A Rocha y Godón".
Según ha detallado la Xunta en una nota de prensa, en el ejercicio han participado siete técnicos y agentes forestales, seis brigadas, un batracio y cinco motobombas de la Consellería do Medio Rural, así como bomberos de Ponteareas, Mos y efectivos voluntarios del municipio portugués de Melgaço.
En cuanto al apoyo sanitario, logístico y de seguridad, han colaborado una ambulancia asistencial del 061 además de efectivos de las fuerzas y cuerpos de seguridad --Unidad de Policía Nacional Adscrita a Galicia (UPA) y Guardia Civil-- y las agrupaciones de voluntarios de Protección Civil de Oitavén-Tela y Ponteareas.
También ha participado en la organización del simulacro para ayudar en la puesta en marcha en escena y exponer diferentes cuestiones agentes del Equipo de Prevención Integral de Incendios Forestales de Pontevedra.