El alcalde propone dos vías en caso de que los informes avalen el proyecto: negociar con la propiedad o una modificación puntual del PXOM
El alcalde de Lugo, Miguel Fernández, ha asegurado que el Gobierno local no apoyará el proyecto de construcción de un edificio de ocho plantas en una parcela de 19.000 metros cuadrados situada entre Ponte Romai y Ponte da Estación, en el barrio de Paradai.
Así se lo ha comunicado a una treintena de vecinos y representantes ecologistas durante una reunión mantenida para hablar sobre este asunto.
"Esa no es la ciudad que queremos", ha aseverado Fernández, que ha defendido la necesidad de "preservar uno de los entornos naturales más valiosos de Lugo". En esta línea, ha anunciado el compromiso de buscar alternativas legales que impidan la transformación de ese espacio junto al río.
El alcalde, acompañado por el concejal de Urbanismo, Jorge Bustos, y el director general del área, Hipólito Pérez, ha explicado que el Ayuntamiento se encuentra a la espera de los informes de impacto ambiental que deben emitir la Xunta de Galicia y la Confederación Hidrográfica Miño-Sil. "Son los técnicos quienes deben determinar si ese proyecto puede o no seguir adelante", ha precisado Fernández.
En caso de que los informes no frenen el proyecto, el Ayuntamiento baraja dos vías: abrir una negociación con los propietarios para buscar una salida pactada o impulsar una modificación puntual del Plan Xeral de Ordenación Municipal (PXOM) que redefina los usos del terreno.