El nuevo alcalde del PP en Touro deberá pleitear contra la mina
martes, 12 de agosto de 2025, 14:17
El PPdeG se ha hecho con una nueva Alcaldía al prosperar la moción presentada por el popular Jesús Reboredo, que este martes se ha convertido en nuevo alcalde del municipio coruñés de Touro al desbancar al actual regidor, Roberto Castro, del Movemento Veciñal, con el apoyo de Darío Rey, exedil de este partido, que en el acuerdo sellado con los populares exige que el Ayuntamiento se persone en los procesos judiciales que incumban la mina de Touro-O Pino.
Como "políticamente indeseable" ha definido el alcalde saliente al edil tránsfuga, que ha abandonado el pleno durante la intervención de Castro y tampoco ha hecho uso de su turno de palabra para defenderse de las acusaciones contra él.
Ante un pequeño salón de plenos lleno, el primero en intervenir ha sido el candidato a la alcaldía, Jesús Reboredo, que ha defendido que esta moción es un ejercicio de "responsabilidad" tras la reprobación de Castro en el pleno de julio. Ahora, ha asegurado, pretende constituir un gobierno de "emergencia" ante la "incapacidad de dialogar" y la "falta de iniciativas" del ejecutivo local.
Además, entre los motivos para llevar a cabo esta iniciativa, Reboredo ha esgrimido la sentencia conocida el pasado mes relativa a su expulsión en un pleno del año 2023 para que "el alcalde pudiera decidir sobre su sueldo con el voto de calidad" porque había empate. "Este es un ejemplo del abuso de poder del actual alcalde, utilizando la Alcaldía como una pequeña dictadura, un autoritarismo impropio de los tiempos en que vivimos", ha reprochado.
Otra de las justificaciones del mandatario popular ha sido el "incumplimiento" respecto al Servizo de Axuda no Fogar (SAF) tras llevar al pleno "un pliego que nada tenía que ver con lo prometido", así como su "negativa constante a adoptar los acuerdos de la oposición".
Por otro lado, ha puesto el foco en la "pérdida de los fondos del plan provincial", un motivo que ve "suficiente" para que el alcalde deje de liderar el gobierno municipal, puesto que los vecinos se han visto "privados de 753.000 euros por un capricho político".
"POLÍTICAMENTE INDESEABLE"
Tras la intervención de Jesús Reboredo ha tomado la palabra el alcalde saliente, Roberto Castro, momento en el que Darío Rey ha abandonado el salón de plenos.
Al inicio de su discurso, el representante del Movemento Veciñal ha pedido disculpas al concejal del Partido Galego --que formaba parte del ejecutivo local-- y a su formación por incluir en las listas a "una persona que resultó políticamente indeseable" y que "tiene intereses económicos personales".
"Asumimos esa responsabilidad. Asumimos el error, aunque creo que pagamos el error demasiado caro, pero la ley electoral permite la maniobra que se está ejecutando hoy aquí y que valida el cambio de gobierno", ha expuesto.
En cuanto a los argumentos esgrimidos por el PP, Castro ha subrayado que esta moción se explica "con una regla de mercado": "Hay un elemento que se somete a venta y hay un grupo dispuesto a comprar".
Respecto a los acuerdos alcanzados entre Rey y el PP en relación con la mina, Castro ha advertido de que las comisiones informativas de medio ambiente "sirven para que cada uno de los miembros que asisten cobren 150 euros", mientras ha reprochado la contratación de una consultora independiente defendiendo que su gobierno contrató "a una empresa para que actúe de parte de los vecinos".
Sobre los fondos del plan provincial, Roberto Castro ha recordado que el PP votó en contra, por lo que, en su opinión, ya se trataba de "una estrategia estudiada, y ha avanzado que esos recursos "no se han perdido" y la Diputación los reinvertirá en la ayuda del año siguiente.
LA OPOSICIÓN DEL PP A LA MINA, "PURO DELIRIO"
Por su parte, el concejal del BNG, Xoán Antón Louzao, que ha votado en contra de la moción, ha defendido el papel del Bloque en el consistorio tourense "siendo fiel a sus principios", pese a que ha reconocido que el Gobierno local "dilapidó las ilusiones y esperanzas que se abrieron" tras los años de mandato del PP en la localidad.
En esta línea, ha explicado que se abstuvo en la reprobación al alcalde porque, aunque "había razones", la alternativa es "un gobierno del PP". "Solo digo que cuando alguien gobierna como un César, lo que nunca puede sorprender es que te salga un Décimo Junio Bruto. Eso ya lo explicó la historia; eso es lo que ha pasado y lo que nos trae hoy aquí", ha ejemplificado.
Además, respecto a la mina, Louzao ha apuntado que "nadie se cree que el PP vaya a cambiar su postura", reconociendo que el actual gobierno "se puso de perfil". "Pero el PP se puso detrás empujando", ha criticado antes de insistir en que "pensar que el PP" se va a oponer a la mina es "puro delirio".
GRITOS DE "TRAIDOR" A REY
Durante la sesión, ni el edil del Partido Galego ni Darío Rey han hecho uso de su turno de palabra. Una vez concluido el pleno y tras jurar Jesús Reboredo el cargo, los concejales del Movemento Veciñal han abandonado el salón de plenos, mientras que los populares se han quedado unos instantes a dar su apoyo al ya nuevo alcalde. Entre los presentes este lunes en Touro se encontraban regidores del PP de la zona como el alcalde de O Pino, Manuel Taboada, el de Sigüeiro, Álex Doval, el de Boqueixón, Ovidio Rodeiro, entre otros.
A la salida, del Ayuntamiento se han escuchado algunos aplausos, pero también gritos de "traidor" al concejal tránsfuga que, pese a que no ha querido intervenir en el pleno, sí ha atendido a los medios de comunicación para defender que lo vivido este martes "viene de atrás", sosteniendo que él "tiene personalidad" y "ningún tipo de interés". "Estoy aquí porque donde dije una cosa, hoy no digo otra", ha argumentado.
Sobre la polémica por la mina, Darío Rey ha reprochado que haya quien "intente dar lecciones", acusando al gobierno de Movemento Veciñal de Touro de no recurrir el acuerdo del Consello de la Xunta de declarar el proyecto de la mina como estratégico.
En este sentido, también ha propuesto que el Ayuntamiento se persone en esta cuestión al estar "directamente implicado", pero el alcalde, ha dicho, "se negó a que se personasen en las causas". Por todo ello, ha aseverado que el acuerdo con el PP "no es ambiguo" respecto a la mina y ha augurado: "El tiempo hablará".