La Masia no solo forma jugadores: forma generaciones. En la gala del Balón de Oro celebrada este lunes en París, el FC Barcelona volvió a demostrar que su cantera es mucho más que una escuela de fútbol. Lamine Yamal y Vicky López, dos productos de la factoría blaugrana, se coronaron como los mejores jugadores Sub-21 del planeta al conquistar los Trofeos Kopa masculino y femenino, en una noche que reivindicó el modelo formativo del Barça como referencia mundial.
Lamine Yamal, de 18 años, revalidó el galardón que ya ganó en 2024, tras liderar al Barça de Hansi Flick hacia el triplete nacional —Liga, Copa del Rey y Supercopa— y rozar la final de la Champions. Su impacto, siendo aún menor de edad, lo sitúa como heredero natural de una estirpe que incluye a Pedri (2021) y Gavi (2022), también formados en La Masia y también ganadores del Kopa.
Por su parte, Vicky López, de apenas 17 años, estrenó el palmarés femenino del Trofeo Kopa tras una temporada brillante con el Barça Femení y la selección española. Su liderazgo en el campo y su madurez competitiva la consolidan como referente de una nueva generación que ya no distingue entre talento masculino y femenino: en ambas ramas, el Barça forma líderes.
La Masia, más que una cantera
Con estos dos galardones, el FC Barcelona se convierte en el único club del mundo que ha ganado cuatro Trofeos Kopa en cinco años, todos con jugadores formados en casa. Un hito que no solo habla de resultados, sino de una filosofía: apostar por el talento joven, educarlo en valores, y proyectarlo al mundo.
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