El alcalde de Pontevedra, Miguel Anxo Fernández Lores, recibió este miércoles a una delegación institucional procedente de Alzira (Valencia), encabezada por su regidor, Alfons Domínguez, con el objetivo de conocer de cerca el modelo urbano de la capital pontevedresa, considerado una referencia en toda Europa.

La comitiva, compuesta por dos concejales y tres técnicos municipales, aprovechó su viaje a Galicia para participar en el III Foro de la Agenda Urbana, que se celebra en A Coruña, y dedicó dos jornadas a visitar Pontevedra.

Durante su estancia, los representantes de Alzira pudieron disfrutar de la gastronomía local y recorrer a pie el centro urbano, experiencia que les permitió comprobar in situ los resultados de las políticas de peatonalización y humanización del espacio público.

En una reunión celebrada este miércoles por la mañana, el alcalde Lores y el director general de Protección Ciudadana, Daniel Macenlle, expusieron las claves del modelo urbano pontevedrés, que ha sido objeto de reconocimiento internacional por priorizar a las personas frente al coche.

Durante un encuentro con la prensa local, Alfons Domínguez destacó que Pontevedra "es una referencia a nivel europeo" en cuanto a planificación urbana sostenible, y señaló que su ayuntamiento llevaba tiempo queriendo conocer en profundidad este proceso de transformación desde el inicio del actual mandato.

Domínguez explicó que en Alzira ya se han llevado a cabo algunas peatonalizaciones y se trabaja en la implantación de "plataformas únicas", pero lo que más le llamó la atención del caso pontevedrés es que "el éxito no reside en la prohibición, sino en que la prioridad cambió", devolviendo el protagonismo a la ciudadanía. "La gente ha asumido este cambio como propio, y eso es fundamental", valoró.

El alcalde valenciano insistió en que la participación ciudadana es clave para el éxito y la permanencia de este tipo de transformaciones urbanas, y se mostró impresionado por la ausencia de coches estacionados en el centro de Pontevedra, lo que calificó como "una gran ventaja, una gran batalla ganada".

Asimismo, subrayó que en Pontevedra "los coches deben circular a la velocidad del peatón", lo que permite recuperar el espacio público como lugar de convivencia. "Se trata de volver a vivir las calles, y adaptar la ciudad para niños y mayores. Si conseguimos eso, será una ciudad cómoda para todos. Y aquí, sin duda, lo habéis logrado", concluyó.

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