La Diputación de La Coruña ve una "provocación" que la familia Franco deposite en Meirás las esculturas del Mestre Mateo

Goretti Sanmartín lamenta que el Ayuntamiento de Santiago y la Xunta no reclamasen medidas cautelares sobre las piezas

La Diputación de A Coruña ha calificado de "provocación" que la familia Franco haya depositado en el Pazo de Meirás las esculturas de Abraham e Isaac del Mestre Mateo una vez concluida la exposición sobre el artista que desde el pasado verano se exhibía en el Pazo de Xelmírez de la Catedral de Santiago.

Así, según informa el ente provincial en un comunicado, la vicepresidenta de la Diputación, Goretti Sanmartín, ha denunciado que las piezas hayan sido reubicadas en el Pazo de Meirás, algo que ha sido constatado en "la primera visita programada" al complejo de Sada (A Coruña).

Hasta su cesión para ser exhibidas en la exposición sobre el Mestre Mateo que recorrió Madrid y Santiago, la familia Franco guardaba las esculturas de Abraham e Isaac en la Casa de Cornide de la ciudad herculina.

Para Goretti Sanmartín, este movimiento es "una provocación" por parte de los herederos del dictador al ubicar estas imágenes en "un inmueble en venta con todo lo que atesora en su interior".

"La impunidad con la que actúa la familia Franco que hace que puedan campar a su aire en un momento en que es un clamor la reclamación tanto del Pazo de Meirás como de las esculturas que son obras de arte singulares del arte universal y que son bienes que fueron comprados por el Ayuntamiento de Santiago", ha señalado Sanmartín.

LITIGIO POR LAS ESCULTURAS
El Ayuntamiento de Santiago presentó una denuncia por la titularidad de las piezas que fue admitida a trámite a finales del pasado mes de diciembre. El consistorio compostelano reclama la devolución de las esculturas --que formaron parte del Pórtico de la Gloria hasta el siglo XIV-- porque entiende que forman parte del patrimonio público y, por lo tanto, "no pueden ser cedidas ni regaladas, ni ha lugar para la prescripción que podría alegar la familia Franco para quedar con las figuras" del Mestre Mateo.

En la demanda, presentada el pasado mes de noviembre, el Ayuntamiento de Santiago incorporaba toda la documentación que "demuestra" que es el "legítimo propietario" de las dos piezas, adquiridas al Conde de Ximonde en 1948.

Estas esculturas, de la escuela del Mestre Mateo, pasaron a manos del Conde de Ximonde en torno al siglo XVIII. Este noble se las vendió al Ayuntamiento de Santiago en 1948 por 60.000 pesetas, a través de un documento en el cual se señalaba que las piezas no podían salir de Compostela, o bien el Ayuntamiento tendría que pagarle una "multa" de 400.000 pesetas.

Pese a ello, las esculturas pasaron a manos de la familia Franco hace más de medio siglo, aunque no existe ningún documento de cesión. En un principio estuvieron en el polémico Pazo de Meirás y, posteriormente, fueron depositadas en Casa Cornide. La situación se detectó a raíz de la exposición de ambas piezas en la muestra sobre el Mestre Mateo que acogió el Pazo de Xelmírez, tras pasar por el Museo del Prado.

MEDIDAS CAUTELARES
Goretti Sanmartín ha criticado que no se hubiese reclamado ninguna medida cautelar para evitar que las obras abandonasen la capital gallega al término de la exposición. Este extremo fue descartado por el Ayuntamiento de Santiago porque entendían que la reclamación no tenía opciones de prosperar y que, incluso, podría ser contraproducente para la demanda abierta por la titularidad de las piezas.

Tampoco la Xunta accedió a presentar una petición de medidas cautelares, si bien la Administración autonómica ya ha iniciado los trámites para declarar las piezas como Bien de Interés Cultural (BIC).

Así las cosas, la vicepresidenta provincial ha lamentado que Meirás continúe siendo "un templo del franquismo donde se está haciendo apología de un régimen represivo", por lo que ha hecho un llamamiento a aunar fuerzas para que "la memoria del dictador no continúe a campar con impunidad".