Noriega reivindica la "unidad popular" como la única "marca" electoral de las mareas municipalistas

El alcalde santiagués asegura que "nunca sobran los turistas" en la ciudad pero que "faltan políticas públicas de gobernanza del turismo"

El alcalde de Santiago, Martiño Noriega, ha vuelto a emplazar a las distintas fuerzas de izquierdas que conforman el espacio de las mareas municipalistas a abandonar el debate de las "marcas" en la elaboración de candidaturas para las elecciones locales del próximo año. "Hay que dejar de hablar de marcas y entender que la marca es la unidad popular", ha aseverado.

Así se ha expresado el regidor compostelano en una entrevista este domingo en la Radio Galega, donde ha asegurado que la decisión de repetir o no como candidato de Compostela Aberta en 2019 la tomará "después del verano" y en ella influirán tanto cuestiones políticas como "personales".

Para Noriega, el espacio de las 'mareas' debe buscar fórmulas para sumar fuerzas y aumentar su peso en las Diputaciones que, pese a considerar estas instituciones "anacrónicas", manejan fondos presupuestarios que son de ayuda para los ayuntamientos.

Cuestionado sobre el liderazgo de Luís Villares en En Marea, ha asegurado que, a su modo de ver, la organización rupturista no debe regirse "según los cánones de los partidos tradicionales" porque representa un espacio político "mucho más complejo y heterodoxo".

En esta línea, ha vuelto a deslizar su malestar con aquellos sectores dentro de En Marea que "fueron bastante críticos con el espacio de mestizaje e hicieron enmiendas a la totalidad", en referencia a Cerna, y que cree que, a pesar de "no ser representativos", "ahora ocupan un espacio de centralidad" en la organización rupturista.

SANTIAGO
El alcalde compostelano ha augurado que el tiempo que resta de mandato servirá a Compostela Aberta para "recoger" los frutos de los tres años de gobierno que cumplirán en el mes de junio y en los que, a su juicio, han conseguido crear "un relato de ciudad".

Noriega ha sido cuestionado por una de las cuestiones que más espacio ha ocupado en la actualidad de la capital gallega en los últimos tiempos: la creación de una tasa turística a la que se opone el Gobierno gallego, que es quien ostenta las competencias en la materia.

De este modo, ha incidido en que en Santiago "nunca sobran turistas" y que despreciar la llegada de visitantes sería "ir contra la historia" de la ciudad. Con todo, defiende que "faltan políticas públicas de gobernanza del turismo" para poder revertir sus efectos en favor de los vecinos.

Para ello, y toda vez que la Xunta se opone frontalmente a la creación de una tasa a las pernoctaciones en Santiago, el consistorio compostelano se plantea "gravar a los autobuses" de excursiones que solo pasan un día en la ciudad y cuyo impacto económico es reducido.

Así, el Ayuntamiento de Santiago podría empezar a cobrar a partir del próximo año una tasa a aquellos autobuses que empleen el aparcamiento municipal de la dársena de Xoan XXIII. De hecho, esta medida está recogida en el Plan director del Turismo presentado hace unas semanas por el gobierno local con la vista puesta en el año 2022.