Gobierno, Xunta, Principado y sindicatos abordan este martes con la empresa el futuro de las plantas

El Gobierno, con representación de los ministerios de Industria y para la Transición Ecológica, representantes de la Xunta de Galicia y del Principado de Asturias, así como de los sindicatos CC.OO. y UGT y miembros de Alcoa se reunirán este martes por la tarde para abordar el futuro de las plantas de A Coruña y Avilés de la multinacional, tras el anuncio de cierre de la pasada semana que pone en el aire el futuro de casi 700 trabajadores.

A la reunión, convocada en la sede del Ministerio de Industria, asistirán, entre otros, el secretario general de Industria, Raúl Blanco; el secretario de Estado de Energía, José Domínguez Abascal, así como el director general de Industria del Principado, Manuel Monterrey; el conselleiro de Economía e Industria de la Xunta, Francisco Conde, y los representantes sindicales Agustín Martín (CCOO) y Pedro Hojas (UGT), informaron a Europa Press fuentes del Ministerio de Industria, Comercio y Turismo.

Con esta cumbre, el Gobierno busca trabajar de forma conjunta con todas las administraciones y agentes sociales en una solución a la situación de las plantas y remarcar a la compañía su rechazo al ERE mientras se buscan alternativas para su continuidad.

Entre las posibles soluciones para garantizar la viabilidad de las plantas se encuentra la de buscar un nuevo inversor, aunque no es la única solución que se tiene actualmente sobre la mesa. Además, se abordará la posibilidad de revisar el marco energético con el fin de lograr más estabilidad en los precios de la electricidad para los próximos ejercicios.

EN CONTRA DEL CIERRE
La pasada semana, la ministra de Industria, Turismo y Comercio, Reyes Maroto, ya adelantó que, de cara a esta reunión, se ha exigido a los representantes de la multinacional Alcoa que lleven documentos que justifiquen su decisión de cerrar dos de las tres fábricas con las que cuenta en España --la otra es la de San Cibrao, en Cervo (Lugo)--.

Maroto subrayó que el "escenario" en el que trabaja el Ejecutivo "es que la empresa no cierre". "Estamos en contra de que cierre", insistió en el Congreso, apuntando que tanto su Gobierno como los gobiernos autonómicos de Asturias y Galicia y los sindicatos "están al lado de los trabajadores".

El pasado 17 de octubre, la multinacional productora de aluminio Alcoa anunció su intención de iniciar un periodo formal de consultas para llevar a cabo un despido colectivo en sus plantas de Avilés y A Coruña, por el que se verán afectados un total de 686 trabajadores (369 en la de A Coruña), tras proceder al cierre de estas fábricas debido a su "improductividad".

Según afirma la compañía estadounidense en un comunicado, se trata de las plantas menos productivas del grupo debido a "problemas estructurales intrínsecos". Alcoa iniciará un periodo de consultas con los representantes de los trabajadores con una duración máxima de 30 días naturales.

Según indicó Alcoa, estas plantas se encuentran afectadas por problemas estructurales productivos y tecnológicos como su "menor capacidad de producción, una tecnología menos eficiente y elevados costes fijos", unidos a factores externos de mercado, como la "sobrecapacidad de producción de China", el elevado precio de las materias primas y el coste de la energía.

MOVILIZACIONES EN A CORUÑA
El pasado sábado una gran movilización recorrió las calles de A Coruña, mientras los trabajadores se encargan de mantener la producción actualmente "con las mismas garantías", pero sin dejar salir camiones.

Mientras, reclaman a las administraciones, de cara a la reunión convocada este martes por el Gobierno con los representantes autonómicos de Asturias y Galicia y los sindicatos, una "solución" que les aporte "seguridad".

Por su parte, el conselleiro de Economía e Industria, Francisco Conde, ha vuelto a pedir a la empresa que "rectifique" la decisión de cierre de la planta de A Coruña, junto con la de Avilés, y al Gobierno que "actúe" para garantizar un marco energético estable.

Asimismo, el alcalde de A Coruña, Xulio Ferreiro, ha incidido en la importancia de la "unidad" para lograr revertir la decisión de la empresa y buscar una salida para la planta coruñesa y la de Avilés.