Interceptado un conductor reincidente con positivo en alcohol y drogas cuando hacía adelantamientos peligrosos en Arzúa

Una patrulla del Sector de Tráfico de la Guardia Civil, que prestaba servicio en tramos de carreteras con alto riesgo siniestralidad, al hacerlo en la N-547 en la localidad couñesa de Arzúa observó como el conductor de una furgoneta, de 37 años, efectuaba un "adelantamiento en tramo de visibilidad reducida invadiendo completamente el sentido contrario".

Así lo ha explicado el Instituto Armado en un comunicado, en el que explica que el conductor interceptado es reincidente y ha obtenido resultado positivo en las pruebas de alcohol y drogas.

El conductor del vehículo, relatan las mismas fuentes, efectuó adelantamiento a una furgoneta camuflada de la Guardia Civil que realizaba patrulla por la zona.

Posteriormente, el conductor intentó adelantar por la derecha a otro vehículo, pero al ser un tramo en subida e ir cargado, "no lo pudo completar", han concretado las mismas fuentes.

Antes de poder ser interceptada debido a la "velocidad notoriamente" superior a la permitida para la vía y para el tipo de vehículo, han indicado las mismas fuentes, el conductor efectuó un nuevo adelantamiento en "curva peligrosa", todo ello "de forma manifiestamente temeraria", ha recalcado el Instituto Armado.

Cuando logró ser interceptado por una patrulla de apoyo, tras ser sometido a la prueba de drogas obtuvo resultado positivo en cocaína y THC con un consumo reciente "debido a la alta concentración de las sustancias detectadas" en el test de saliva, ha destacado la Benemérita.

Además, el conductor también dio resultado positivo en la prueba de alcohol al obtener 0,35 mg/l en ambos test, por lo que quedó inmovilizado hasta la desaparición de las causas.

PUNTOS
Los guardias civiles han comprobado que el conductor interceptado había recuperado hacía poco su permiso de conducción tras haber perdido la totalidad de los puntos asignados por diversas infracciones similares.

Por este motivo, el conductor contaba con ocho puntos, los que se obtienen tras recuperar el permiso, y ha vuelto a perder seis por la conducción temeraria y otros cuatro por superar las tasas de alcohol permitidas.

Además, el conductor se enfrenta a la pérdida de otros seis puntos tras confirmarse por el laboratorio autorizado el positivo en cocaína y THC que obtuvo tras someterse a las pruebas.