Empresarios de la madera critican ordenanzas municipales que "imponen tasas discriminatorias" para el sector

Las asociaciones de la cadena de valor de la madera de Galicia han denunciado la "extralimitación de competencias de los ayuntamientos" en la publicación de ordenanzas forestales y "la imposición de tasas discriminatorias para la actividad forestal".

Las organizaciones critican la reciente publicación de ordenanzas municipales en varios ayuntamientos de la provincia de Lugo --concretamente en Meira, Pol, Ribeira de Piquín, A Pontenova, Riotorto y A Pastoriza, apuntan--, que "gravan la actividad forestal con laimposición de tasas al desarrollo de la misma y, como resultado final, a los propietarios forestales que gestionan sus parcelas para producir madera, obteniendo un importante complemento a sus ingresos familiares".

Estas ordenanzas, indican las entidades, "suponen un impuesto más a la propiedad forestal, discriminando al sector de la madera con respecto a otros sectores primarios que se desarrollan en el mismo territorio y que no sufren esta penalización".

Las organizaciones profesionales recuerdan que el buen estado de las pistas, o su reparación, si es el caso, tras su intervención, es "necesario para el sector" y su actividad. Sin embargo, apuntan, el cobro de tasas por la ejecución de la actividad "no lo garantiza, sino que son la responsabilidad empresarial y la mejora de la organización de la propia actividad dentro de cada municipio, las claves para hacer compatible la actividad forestal y la conservación óptima de las vías de titularidad municipal".

Para evitar estos daños, el sector reclama la adaptación de las vías a la evolución de la maquinaria forestal, así como realizar una organización de la propia actividad a nivel municipal, como sucede en algunos ayuntamientos, "que ya marcan las vías adaptadas para la saca de madera, la creación de parques de madera y puntos de acopio, zonas de viraje de camiones, etc.".

PUJA DE MADERA
También en el sector forestal, la Consellería do Medio Rural ha adjudicado 34 lotes por casi 2,1 millones de euros en su tercera subasta pública electrónica de madera, celebrada esta semana en la jefatura territorial de Lugo. La práctica totalidad de los lotes pertenecían a comunidades de montes vecinales en mancomún con convenios o consorcios de gestión con la consellería.

En total, se enajenaron 39 lotes que sumaban 90.500 metros cúbicos de madera, principalmente de pino. En concreto, se presentaron ofertas para 34 de ellos, por parte de 28 empresas del sector. Cabe destacar que el valor final de la madera vendida ascendió a los 2.104.222 euros, frente a la tasación inicial de 1.889.108 euros.