Xunta defiende que la ley de salud regula la vacunación si la norma estatal "la impone" y "nunca" con carácter general

El conselleiro de Sanidade asegura que "no colisiona" con la ley orgánica, que es la que puede "actuar sobre derechos fundamentales"

El conselleiro de Sanidade, Julio García Comesaña, ha incidido este jueves en que la nueva ley de salud, aprobada por el Parlamento gallego esta semana, regula las condiciones de vacunación en caso de que el desarrollo de la ley orgánica 3/1986 impusiera la obligatoriedad y, en todo caso, ha reiterado, esa vacunación no se impondría "nunca con carácter general", sino en situaciones concretas "e incluso individuos concretos".

Así lo ha trasladado García Comesaña, a preguntas de los medios, durante una visita a la planta de Biofabri, del grupo Zendal, en O Porriño (Pontevedra), en la que ha acompañado a la ministra de Sanidad, Carolina Darias.

El conselleiro ha defendido que lo que ha hecho Galicia ha sido "adaptar" la ley orgánica de 1986, que establece que "las autoridades sanitarias" pueden tomar las medidas preventivas y oportunas para controlar una enfermedad. Al respecto, ha recordado que tanto la Xunta como otros gobiernos autonómicos llevan meses adoptando medidas "con una base jurídica mejorable", ya que el Gobierno no ha cumplido su compromiso de actualizar y desarrollar la normativa en vigor al respecto.

García Comesaña ha señalado que esa falta de seguridad jurídica se ha reflejado en casos como el de Euskadi, donde los tribunales han tumbado la medida de cierre total que afectaba a la hostelería en determinadas zonas de esa comunidad. "Ya hace tiempo que le dijimos al Gobierno que había que reforzar las seguridad jurídica, y dijo en mayo que sí, pero (ese refuerzo) no ha llegado, por eso el Parlamento gallego ha dado este paso con la nueva ley autonómica", ha añadido.

El titular de Sanidade ha incidido en que la norma gallega "para nada colisiona con la ley orgánica" estatal, "que es la que realmente tiene capacidad para actuar sobre los derechos fundamentales".

"NUNCA" CON CARÁCTER GENERAL
Al respecto, ha repetido que la ley gallega se limita a regular y concretar cómo se haría la vacunación en caso de que "la ley nacional imponga la obligación". En todo caso, ha matizado, "nunca se habla de grupos generales de población, sino de situaciones concretas y casi de individuos concretos".

Además, ha abundado García Comesaña, el propio Plan Estatal de Vacunación dice, en su preámbulo, que la vacunación será voluntaria de forma general, "salvo los casos que pueda establecer esta ley orgánica".

Por tanto, ha concluido, la norma aprobada en la Cámara gallega "da seguridad jurídica" a las medidas que la Xunta ya viene adoptando desde hace meses. "Si el gobierno modifica la ley orgánica, la podremos usar pero, mientras tanto, hemos hecho un desarrollo específico", ha aclarado.

El texto de la ley gallega aprobada esta semana recoge un régimen de sanciones de hasta 600.000 euros en tres niveles --leve, grave y muy grave-- para penar el rechazo a vacunarse o hacerse pruebas, pero solo en caso de que las autoridades sanitarias establezcan su obligatoriedad.