El Ayuntamiento de Pontevedra exige a la Xunta y al Gobierno que verifiquen la seguridad de la fábrica de Ence

El PP se muestra "preocupado" por un posible "inminente cierre que va a dejar en la calle en Pontevedra a 500 familias"

El Ayuntamiento de Pontevedra exige a la Xunta y al Gobierno que verifiquen la seguridad de la fábrica de Ence y también hará un requerimiento formal a la empresa para que aclare la situación del complejo industrial de Lourizán.

Para el gobierno municipal de Pontevedra --formado por BNG y PSOE-- el contenido del video en el que el presidente de Ence, Ignacio de Colmenares, alerta de la posibilidad de que "en cualquier momento" haya un "susto mayúsculo medioambiental" en la fábrica de Lourizán, es "muy preocupante".

Así, la portavoz del gobierno local, Anabel Gulías, ha dicho este lunes que el Ayuntamiento tiene "claro que con la tranquilidad y con el sueño de las pontevedresas y de los pontevedreses no va a jugar ni Ence ni nadie", ha asegurado en rueda de prensa.

Anabel Gulías ha valorado como "escandalosas" las declaraciones del máximo responsable de la compañía pastera por esto ha señalado que "todas las formaciones políticas de este Ayuntamiento" deberían "tener la misma postura de exigirle a la empresa que abandone esta política de confrontación y coacción y que aclare de una vez por todas cuál es la situación de la pastera en este momento".

Gulías se ha referido así al vídeo que se difundió en el fin de semana en el que el presidente de Ence alertaba de un posible problema de seguridad en la fábrica de Pontevedra si no se hacía una inversión de 200 millones de euros.

REQUERIMIENTO FORMAL
Tras conocerse el vídeo, Anabel Gulías anunció que el gobierno municipal, en el marco de sus competencias, hará un requerimiento formal a la empresa "para que aclare esa situación de inseguridad que el propio presidente de la pastera comenta en el vídeo". Además, notificará de oficio a la Xunta de Galicia, en las consellerías competentes y al propio Ministerio para que verifiquen la situación y controlen la seguridad de la fábrica.

"Necesitamos saber y precisamos tener la certeza y la seguridad de que 84.000 vecinos y vecinas de Pontevedra viven en un entorno seguro" ha insistido Anabel Gulías a este respecto.

También ha indicado que la difusión de las declaraciones del vídeo responden a una trayectoria y a una línea de acción basada en "chantajes, coacciones y amenazas", encaminada, según ha explicado, a "seguir obteniendo privilegios y seguir siendo la única empresa que parece que tiene barra libre para que le hagan leyes a medida y para saltarse condicionamientos legales".

Asimismo, Anabel Gulías le ha pedido a los responsables de la empresa que "dejen de jugar, que dejen de lanzar este tipo de ultimátum con el fin de amedrentar, coaccionar y asustar y que hagan efectivo el traslado de la pastera, y que lo hagan como hacen todas las empresas, sin pedir ningún trato de favor".

REACCIÓN DEL PARTIDO POPULAR
El portavoz del grupo municipal del Partido Popular de Pontevedra, Rafa Domínguez ha compartido la "doble preocupación" que le produjo el vídeo del presidente de Ence Ignacio de Colmenares en el que alerta de la posibilidad "de un susto mayúsculo ambiental".

"La primera preocupación es oír al máximo dirigente de Ence decir que puede haber un problema medioambiental", ha señalado Rafa Domínguez que "como pontevedrés por supuesto" que le "preocupa".

El portavoz popular ha comentado en rueda de prensa que consultó estas afirmaciones de Colmenares. "Y me dicen que cumple con todas las medidas de la Dirección Xeral de Calidade Ambiental", ha señalado. Además, ha añadido que las inspecciones "rigurosas" que se han hecho a la fábrica de celulosas "las cumple". Aunque ha reiterado que esa afirmación del presidente de la compañía pastera "desde luego a mi me deja cierta preocupación".

En todo caso Rafa Domínguez también ha indicado que "más preocupación" le deja que están, "probablemente, ante un inminente cierre que va a dejar en la calle en Pontevedra a 500 familias". "No creo que en Pontevedra en el año de la crisis, en el año más complicado económicamente, sea una buena noticia", ha apostillado. "Va a ser un golpe para la ciudad terrible", ha concluido.