Pensiones: entre el miedo a la privatización y a no llegar a fin de mes

Las pensiones en España han movilizado al colectivo de pensionistas como no se ha hecho en otros lugares de la Unión Europea. En los últimos años se han creado asociaciones desvinculadas de fuerzas sindicales cuando en el entorno europeo suele ser habitual. “El caso español es único porque al ver que desde los sindicatos apenas se hacía nada, se optó por crear asociaciones” dice Manuel Gundín de MODEPEN. Por otra parte, el miedo a las posibles “quitas” a la “hucha de las pensiones” también han sido motivo de protesta por parte de este colectivo. El temor sigue existiendo sobre todo cada vez que se realizan negociaciones sobre el llamado “Pacto de Toledo”. “Confío que sindicatos, partidos y empresarios tengan buen juicio manteniendo el Pacto de Toledo tal como está, aunque pueden aplicar retoques al mismo” dice Lázaro González del PMP. En tal caso, los objetivos que mueven a los diferentes colectivos son la revalorización de las pensiones y que el sistema siga siendo público y solidario.

¿ES SOSTENIBLE EL ACTUAL SISTEMA?

El sistema público de pensiones español es “solidario entre jóvenes y mayores porque a mayor número de cotizantes mejores pensiones” señala Lázaro González. “El sistema actual es sostenible si se legisla con garantías para poder pagar las próximas décadas”. Entre los elementos que garantizarían las pensiones está a mayor sueldo más cotización, que no se tengan en cuenta los 24 meses menos cotizados y ajustar las pensiones a la inflación. Son algunos de los puntos que para PNP pueden garantizar actualmente el sistema. 

“Es importante que no existan condicionantes para las personas que han cotizado 40 años y sobre todo, que se haga una auditoría sobre los fondos existentes” remarca Manuel Gundín. La auditoría sobre el dinero destinado a las pensiones es una enmienda a la reforma del sistema público de pensiones realizada en 2021. Así, se podría calcular cuanto dinero procedente de la Seguridad Social se ha usado de manera impropia “desde 1967”.
 

“El actual modelo público de pensiones puede permitir a futuro mantener el sistema de pensiones vigente que es un sistema ideal” resalta Gundín. Según el miembro de MODEPEN durante años las recaudaciones de la Seguridad Social han servido para pagar pensiones no contributivas y para otras contingencias. Por otra parte, la “generación del baby boom” se está jubilando y en una década se irán incorporando más personas. “La generación del baby boom se incorporará de forma paulatina durante 10 o 12 años, el ahorro se va agotando aun así el sistema de financiamiento es sólido” describe González. 

En tal caso, la incorporación paulatina de los babyboomers llegará a un tope que después descenderá. Esto se explica ante la disminución de las tasas de natalidad en las generaciones posteriores al baby boom. Sin embargo, el sistema puede verse afectado durante este período ante lo cual “son necesarios los pactos y acuerdos políticos así como con los sindicatos”.

POBREZA ENTRE PENSIONISTAS

La inflación ha devaluado buena parte de las pensiones, sobre todo aquellas más modestas, 600, 800 o 900€. “Tengamos en cuenta que el precio de los alimentos ha subido un 30% y esto no pueden soportarlo las pensiones mínimas, por tanto el índice de pobreza ha aumentado porque hai gente sin dinero suficiente” dice Gundín. “La inflación se ha desbocado en los tres o cuatro últimos años con lo que muchas pensiones no son suficientes y muchos perceptores están en la pobreza” confirma González.
 

En este sentido, la principal petición es que las pensiones vayan subiendo según el IPC real, no con un IPC teórico calculado a principios de año y que al final había que compensar con una paga que cubría la diferencia entre el IPC teórico y el IPC real. 

Desde MODEPEN señalan que de nueve millones de pensionistas que puede haber en España, tres millones de personas cobran por debajo del SMI (1.134€) y dos millones de jubilados cobran 800€ o menos, es decir, hay cinco millones de pobres entre los pensionistas. En el caso gallego el total de pensionistas es de 690.000 según datos recogidos en marzo de 2024. Trescientas mil personas cobran una pensión inferior al SMI y doscientas mil pensiones igual o menor a 800€. 
 

Estos datos colocan a Galicia en segundo lugar después de Extremadura como la comunidad con las pensiones más bajas de España. Un cálculo aproximado puede dejar una diferencia de entre 400 a 600€ entre una pensión en Galicia y la pensión media española. 
 

Por todo esto reivindican la equiparación de la pensión con el SMI y subidas del IPC correspondientes. Si no se realizan quitas y se mejora la situación laboral con mejores salarios y más contribuyentes, el sistema no tendría por qué resentirse. Es por ello que los pactos de estado y los acuerdos que incluyan a todos los agentes sociales interesados son necesarios de cara a garantizar el futuro de las pensiones.