Usuarios del transporte escolar y por carretera cargan contra Monbus: "Retrasos, buses que no pasan, dejan a la gente tirada..."

El verano en los colegios e institutos, lejos de corregir errores, ha servido como paréntesis en la vida de los centros, pero poco más, porque la vuelta al cole ha supuesto el regreso de viejos fantasmas, entre ellos el ya clásico problema con el transporte escolar, con Monbus, concesionaria en muchas líneas, en el centro de la crítica. 
 

Los problemas, sin embargo, van más allá del servicio de transporte escolar, ya que los usuarios del transporte por carretera vuelven a entonar viejas críticas: autobuses que no pasan, retrasos, buses que dejan plantados en la parada a los usuarios… Las críticas van dirigidas tanto a la empresa como a la Xunta de Galicia, ya que se trata de contratos públicos que no están cumpliendo con los estándares de calidad exigidos, a juicio de los usuarios. 

“SE ESTÁ DANDO UN MAL SERVICIO”

La presidenta de la Federación de ANPAS de Compostela, Esther Martínez, denunció en RNE que los problemas que arrastraba el servicio el año pasado siguen siendo los mismos y que no se ha hecho nada por remediar las deficiencias: “Se producen retrasos, inseguridades. Nos comentan que en ocasiones van muy deprisa porque sino no llegan, otro día se olvidan de parar en algún punto de la ruta…situaciones que dejan ver que se está dando un mal servicio”.
 

En esa línea, Martínez pone el foco sobre Monbus, empresa que posee el grueso de los contratos de este tipo y sobre la que cree que “quien mucha abarca poco aprieta”. Los usuarios del transporte por carretera coinciden en esa tesis y Teresa Vázquez, portavoz de la ‘Plataforma Transporte Público Digno en Ferrol e Comarca’, sostiene que es la “pasividad” de la Xunta la que permite que Monbus no corrija sus deficiencias. 

“Sitio en el que está Monbus sitio que tiene la misma problemática. Quitan líneas, quitan horarios, queda gente tirada, autobuses que no pasan cuando tienen que pasar…nadie se toma en serio el tema”, lamentaba la portavoz para RNE, que pide “medidas” al Gobierno de Galicia.

INVESTIGACIONES

Desde la pasada primavera el goteo de informaciones que comprometen la sospechosa relación de “amiguismo” entre la Xunta y Monbus han sido constantes. En junio el TSXG anuló la adjudicación de varios lotes de transporte escolar a Monbus al considerar el tribunal que en los contratos alcanzados la firma era la empresa que dominaba las UTEs, algo que "tenía que haber apreciado" la Xunta. 

La empresa defendió en su día la legalidad de los contratos y que recurriría ante el Supremo, mientras que el Ejecutivo autonómico subrayaba que cumplía “escrupulosamente” con la ley. Las investigaciones contra Monbus -también contra Alsa- y la Xunta se suceden por considerar la Justicia que hubo un reparto del mercado en favor de dos firmas, los que llevó a Galibus a presentar una denuncia contra el director xeral de Mobilidade por "prevaricación administrativa" beneficiando a Monbus. 

Trabajadores y sindicatos alentaron las movilizaciones que tuvieron lugar en la primavera pasada, pero al no existir cambios podrían darse nuevas protestas este otoño si la situación continúa por este mismo camino.