Pedro Sánchez da la estocada a Alberto Núñez Feijóo

Pasa de querer derogar el sanchismo a rogar el sanchismo. Un cambio de opinión que lo hace para “salvar “al país. ¿No será para salvarse él tal y como tiene su investidura y una posible crisis interna en su partido?

El candidato Feijóo invita a reunirse al presidente en funciones y aspirante a seguir en la Moncloa, Pedro Sánchez, para hablar de su posible investidura, una reunión que acepta el líder de los socialistas españoles. El encuentro se lleva a cabo este miércoles en el Congreso de los Diputados, un escenario de neutralidad, donde además se encuentran también todos los medios de comunicación.

La reunión entre los dos políticos, de menos de una hora de duración, era la ocasión perfecta para Pedro Sánchez: no rehusar la invitación, y tiene la oportunidad públicamente de rechazar las propuestas del aspirante. Mientras que Feijóo ha querido escenificar que es un hombre de “estado” y se presta a pactar. Pasa de querer derogar el sanchismo a rogar el sanchismo. Un cambio de opinión que lo hace para “salvar “al país. ¿No será para salvarse él tal y como tiene su investidura y una posible crisis interna en su partido?

En esa reunión breve, en la que se supone que un cuarto de hora lo habrán dedicado a hablar de las vacaciones y de cómo se lo han pasado, Feijóo le ha propuesto a Sánchez un acuerdo entre los dos grandes partidos, en aras de la centralidad y que sea la lista más votada la que pueda gobernar, es decir que lo dejen gobernar a él. Lo que se supone que ha indignado a Sánchez tras la postura de los populares de no dejar gobernar a los socialistas en Extremadura, Canarias y más de cien ayuntamientos donde el PSOE fue la fuerza más votada y ahora le sale con eso el candidato -¿fallido?-.

El líder popular le ha hecho entrega de un documento de cuatro folios en el que le planteaba la firma de seis pactos: de regeneración democrática;  el Estado de bienestar; el saneamiento económico; la conciliación y ayudas a las familias;  pacto nacional del agua y un pacto territorial, enfatizando en su rechazo a “solicitudes de referéndum de independencia y de amnistía”. Son los enunciados, porque al parecer las propuestas son genéricas sin entrar a concretar las medidas y cómo se llevarán a cabo. Cuatro folios no dan para mucho más y los calores han frenado la imaginación.

Feijóo se quedará en eso, aspirante, lo que le llevará, como viene siendo habitual en los últimos tiempos en el PP, a una crisis en su partido y el asalto de la ambiciosa Isabel Díaz Ayuso.

Feijóo le propone a Sánchez que los socialistas apoyen su posible gobierno que tendría una duración de dos años, del que formarían parte personas independientes de reconocido prestigio.  La respuesta de Sánchez no se ha hecho esperar, y con esa sonrisa de satisfacción que suele prodigar cuando cree que ha ganado la jugada, ha rechazado la propuesta, no sin antes invitándole a llegar un pacto para llevar a cabo antes de que finalice el año, la renovación del Poder Judicial, que lleva ya demasiado tiempo sin producirse con el deterioro correspondiente, el cabreo de sus señorías y el aviso de Europa para que se pongan de acuerdo.

La reunión ha terminado como se esperaba, aunque algunos tenían la falsa esperanza de que algo saldría. Estaba visto que no, no obstante a los dos protagonistas les interesaba que se produjera el encuentro, obviamente por razones diferentes, pero eso es hacer política. ¿Quién ha ganado esta partida? Es evidente que Pedro Sánchez. El que tiene medio atados los acuerdos con todos los grupos políticos que le van a dar su apoyo a su investidura. Apoyo que no le van a salir gratis, más bien todo lo contrario. Mientras que Feijóo, queriendo dar una imagen institucional se ha reunido con el líder socialista, que le ha tendido la mano para saludarlo, mientras tenía claro que era la mejor ocasión para dejar más solo que la una al candidato nombrado por el Rey. La estocada ya está dada, y si no se produce un milagro, Feijóo se quedará en eso, aspirante, lo que le llevará, como viene siendo habitual en los últimos tiempos en el PP, a una crisis en su partido y el asalto de la ambiciosa Isabel Díaz Ayuso. No pasará mucho tiempo para que eso se produzca… Tiempo al tiempo.