A la joven se le perdió la pista el pasado sábado en la ciudad del Lérez.
El octogenario desaparecido desde este jueves en el municipio coruñés de Ponteceso ha sido localizado sin vida en la mañana de este viernes.
El muchacho fue localizado después de más de una semana de búsqueda. Su desaparición responde a una fuga voluntaria del menor.
El cuerpo podría corresponder a un hombre de 40 años cuya desaparición se denunció hace unos días en ese municipio, aunque por ahora la Guardia Civil no descarta ninguna hipótesis.
La inteligencia artificial (IA) ya juega un papel crucial en la localización de personas desaparecidas mediante el análisis de imágenes capturadas por drones. Al utilizar algoritmos avanzados de visión por computadora, la IA puede procesar grandes cantidades de datos visuales para identificar patrones, características y posibles ubicaciones relevantes. Estos algoritmos pueden detectar señales como la presencia humana, cambios en el entorno o estructuras específicas. Esta capacidad de análisis automatizado y rápida permite a los equipos de búsqueda y rescate focalizar sus esfuerzos en áreas específicas, aumentando la eficiencia y mejorando las posibilidades de localizar a individuos desaparecidos en entornos extensos y difíciles de acceder. Desde ahora está disponible en las buscas de la AXEGA 112, las emergencias de la Xunta de Galicia.
El joven, alto, de complexión fuerte y con tatuajes en la cara, no ha dado señales de vida a su familia desde hace 10 días.
La última vez que fue vista la mujer, de 75 años, fue este martes en la ciudad herculina.
Efectivos de Guardia Civil, Protección Civil y voluntarios buscan a un joven de 30 años desaparecido desde este lunes en O Milladoiro (Ames), después de que saliese a dar un paseo y no regresase.
Cada día se denunciaron más de tres desapariciones en Galicia el año pasado, un importante aumento respecto a los números de hace unos años. El responsable de emergencias de Galicia ha explicado hoy en el Parlamento los factores que ayudan a explicar esta preocupante tendencia, factores que se van a agravar en los próximos años.
El hombre había desaparecido el pasado domingo y desde la familia temían que se pudiese haber desorientado.
Los niños tenían 13, 9, 4 y 1 años de edad y habían desaparecido el pasado 1 de mayo
Cuando se cumplen tres semanas de su desaparición, las autoridades han confirmado que el cuerpo encontrado en Vedra es el del vecino de Teo de 62 años.
Hay dos turnos, pero cualquiera se puede incorporar posteriormente. La busca intensiva continúa tanto por las fuerzas del orden como por parte de amigos, vecinos y familiares cuando van camino de dos semanas desde la repentina desaparición.
Han pasado ya diez días desde la desaparición de este hombre en el lugar de Cepeda, Cacheiras, Teo.
La Policía Nacional de Vigo investiga la desaparición de un joven de 25 años, que falta desde el pasado miércoles, día 8 de marzo, en la ciudad olívica.
El residente de Valga (Pontevedra) y natural de A Devesa desapareció sin dejar rastro el día 7 de febrero. Sus vecinos llevan varios días participando en los dispositivos de busca, por ahora, sin éxito.
El menor de A Coruña que faltaba de su domicilio de A Coruña desde el lunes ha sido localizado en Vigo, según han informado fuentes policiales consultadas por Europa Press.
La Guardia Civil busca a un hombre de 48 años de edad desaparecido en la localidad pontevedresa de Gondomar desde el pasado jueves, día 19 de enero.
La mujer de 74 años que faltaba de su casa en Santiago desde la tarde del domingo ha sido localizada en buen estado de salud en la mañana de este martes.
La desaparecida, que salió de su domicilio para para un paseo por el barrio, está ausente desde las 16:30 horas del domingo. Este caso entronca con otro ocurrido en Carballo, donde también buscan a un hombre desaparecido que padece la misma enfermedad. Foto cedida por AGADEA La Policía Nacional ha recibido la denuncia por la desaparición de María José Casal Otero, que se ausentó de su domicilio ayer por la tarde, en torno a las 16:30 horas, y de la que se desconoce su paradero. La desaparecida es usuaria de la Asociación Galega de Axuda aos Enfermos con Demencia Tipo Alzhéimer (AGADEA Santiago), que se ha hecho eco de su desaparición mediante un comunicado. María José tiene 734 años, 1,60 metro de alto, lleva gafas y en el momento de su desaparición vestía un abrigo negro, pantalones vaqueros claros y un jersey a rayas blancas y azul marino.