Aunque no es considerada una de las medusas más peligrosas, puede representar un riesgo para los seres humanos . La Pelagia noctiluca tiene tentáculos llenos de células urticantes cargadas de veneno. Cuando una persona entra en contacto con estos tentáculos, puede experimentar dolor, picazón, enrojecimiento e irritación en la piel. En casos más graves, las picaduras pueden causar reacciones alérgicas, dificultad para respirar y otros síntomas adversos.
Protección Civil de Carball manifiesta que hay una alta concentración de medusas en los arenales del municipio coruñés.
La Pelagica Noctiluca, una medusa de color morado-parduzco, está resultando muy incómoda a los bañistas.
En nuestras aguas no hay medusas con una picadura que pueda provocar la muerte, pero sí algunas especies capaces de fastidiarnos el día de playa.
"Tiene un parecido" con la carabela portuguesa, aunque su tamaño es menor y su veneno "es inofensivo para los humanos"