El alcalde de Ourense fijó un nuevo intento de demoler la vivienda de Reza para este miércoles, 10 de junio

Sólo un par de horas después de la comparecencia de Agustín Fernández ante los medios de comunicación este martes, el Alcalde de Ourense firmó el decreto para demoler la vivienda de Rosa Álvarez en Reza: este miércoles, a las ocho y media de la mañana. En el decreto, el regidor municipal pide a las policías Nacional y Local "actuar compulsivamente" con quien impida que se lleve a cabo el derribo, y a la Policía Local dice el alcalde que acuda "preparada para ello".

Pese a lo manifestado a media mañana de este martes por el Alcalde de Ourense descartando concretar fecha alguna para un nuevo intento de demolición de la vivienda de Rosa Alonso y Miguel Fernández en el barrio de Reza de esta ciudad, el regidor municipal firmó a última hora de la mañana un nuevo decreto por el que fija dicha demolición para las ocho y media de la mañana de este miércoles, día 10 de junio.

Agustín Fernández dio salida por Rexistro del Concello a dicha orden pasadas la una y media de la tarde, con destino al Juzgado del Contencioso Administrativo núm. 1 de esta ciudad, donde entró posteriormente. De este modo, la nueva orden del alcalde de Ourense se produjo sólo horas después de afirmar a los medios de comunicación que el procedimiento seguía en marcha, pero sin concretar fecha para la nueva demolición y aún dando a entender que ésta no se produciría en tan corto espacio de tiempo.

El decreto establece que ha finalizado el plazo de 48 horas para la retirada voluntaria de muebles y enseres por parte de los propietarios de vivienda, por lo que se le ordena a la Policía Local que a partir de las ocho y media de la mañana de este miércoles "acuda preparada, de ser preciso, para actuar compulsivamente en caso de que se impida a la empresa constructora llevar a cabo las labores de demolición".

Al técnico municipal responsable de la demolición, se le ordena "levantar inventario de todos los efectos y enseres que serán retirados al exterior, junto con la Policía Local", para lo que también se habilita a la empresa constructora designada para los trabajos de demolición.

El decreto concluye solicitando el alcalde de Ourense "auxilio a la Policía Nacional" para que también a las ocho y media de la tarde "actúe compulsivamente en caso de que se impida la entrada y/o las citadas labores". De todo lo que Agustín Fernández pasó a dar cuenta al Contencioso-Administrativo número 1 de esta ciudad, estableciendo que contra lo dispuesto no cabe interponer recurso "por tratarse de acto dictado en estricta ejecución de Auto".