​Los sindicatos cargan contra el cierre "ilógico" de "al menos 250 camas" en Santiago

La comisión de centro del complejo hospitalario universitario de Santiago (CHUS) ha cargado duramente contra el cierre de camas previsto por el Sergas en el área sanitaria. Lo cifran en "al menos 250" camas y lo consideran carente de "lógica asistencial", porque "no es cierto que en verano haya menos pacientes".

Así lo ha denunciado la representante de CIG-Saúde Lourdes García, durante una concentración en el vestíbulo del Hospital Provincial de Conxo, donde sindicatos sanitarios (CC.OO., CSIF, CESM, Omega, CIG, SAE, Sagap, UGT y Satse) han reclamado una sanidad "pública y de calidad" y han clamado contra el cierre de camas.

Según los datos que ha facilitado esta sindicalista, "a día de hoy" ya están "vacías unidades enteras" como neumología en el Provincial, la planta de medicina interna del Hospital Gil Casares --43 camas que, según ha dicho, están cerradas desde el inicio de mayo-- y nueve camas en la unidad de media estancia.

Ahora, según ha augurado, "progresivamente se van a ir cerrando traumatología, la planta de ojos, dermatología, quirófanos... (todo ello en Conxo)". "Y no es un cierre estival, porque hay unidades como neumología y medicina interna que siguen cerradas en octubre e incluso noviembre".

FALTA DE PLANIFICACIÓN

Además, García ha acusado de "oscurantismo y falta de transparencia" a la gerencia del área sanitaria, que, actualmente, según ha expuesto, aún no ha trasladado a las centrales los datos oficiales de previsión de cierre ni un cronograma de las actuaciones previstas. "No hay planificación", ha denunciado.

Asimismo, ha responsabilizado a la gerencia de interpretar las leyes "como le conviene", de modo que cierra "camas y hospitales", supuestamente, para implementar medidas "que sostengan el sistema sanitario". "Para no contratar personal y utilizar el personal fijo de esas unidades que se cierran para cubrir las vacaciones de otros trabajadores", ha recriminado.

La comisión de centro ha cargado contra "esta agresión" al entender que "supone un deterioro de la sanidad pública" y que pretende un "ahorro de recursos públicos a costa de reducir las prestaciones sanitarias".

A los trabajadores que se verán afectados, según la portavoz de CIG-Saúde, "en vísperas" del cierre de las unidades "no se les había comunicado ni dónde van a pasar el verano trabajando". A este respecto, ha lamentado también ausencia de "criterios transparentes" para decidir cómo "mover al personal".

Preguntada por el plan de contingencia que anunció la gerencia, ha subrayado que el comité "no se lo cree", porque "mienten y mienten reiteradamente". "Todos los veranos dicen igual y luego lo que podemos ver es que el servicio de urgencias está colapsado, con 20 o hasta 30 pacientes pendientes de ingreso que tienen que esperar hasta tres días por una cama muchas veces", ha incidido.

PLANIFICACIÓN "SIMILAR" A LA DE 2015

La gerencia de gestión integrada de Santiago ha señalado que la planificación este año en el área es "similar" a la del anterior, pero ha asegurado que hay "ligeras diferencias" como, "por ejemplo", que "en cirugía está previsto utilizar más".

Fuentes del Sergas han expuesto que "cada gerencia analiza las cifras históricas de ocupación y actividad de veranos anteriores y planifica la del verano siguiente según las necesidades y el personal disponible y en función de eso calcula el porcentaje de ocupación de camas que va a tener durante el verano".

Así, cifran en unas 1.256 las camas que se van a necesitar en los meses de verano (el 86%), de un total de 1.460 camas de la gerencia de área. De estos datos se extrae que el cierre, según el Sergas, alcanzará a unas 204 camas. La comisión de centro del complejo hospitalario de Santiago (Chus), por su parte, cifró el cierre en "al menos 250 camas"

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"De todas formas, como es sabido y la experiencia ha demostrado, en el momento en que sean necesarias, se habilitarían inmediatamente, siguiendo las pautas del plan de contingencia de la gerencia", subrayan, además de añadir que de esto "fueron informados los representantes sindicales por el gerente hace semanas en uno de los encuentros periódicos que mantienen".