El teléfono de Sara Silva apareció en su casa, en la que no había signos de violencia. Tenía previsto marcharse de la aldea donde estaba vendimiando a los pocos días, pero desapareció sin llevarse nada y sin dejar pistas. 


El subdelegado del Gobierno en Ourense, Emilio González Afonso, ha asegurado este miércoles a los medios de comunicación tras una rueda de prensa para informar sobre medidas contra la violencia de género que "no hay ninguna señal ni ningún dato" que permita saber "qué ha ocurrido" e "iniciar una hipótesis de investigación concreta" en relación a la desaparición de una mujer de 58 años en la tarde del pasado martes, 25 de septiembre, en Monterrei (Ourense).



UN CASO "BASTANTE EXTRAÑO"
En este sentido, ha subrayado que "se barajan todo tipo de hipótesis y posibilidades", ya que el caso es "bastante extraño", y ha concretado que "se han movilizado todos los recursos necesarios que se suelen protocolizar en este tipo de situaciones", tanto Guardia Civil como Policía Judicial, con "búsqueda de perros adiestrados y apoyo de helicópteros".

Asimismo, ha informado que se han investigado "posibilidades sobre las causas de la desaparición", que se produjo, según González Afonso, cuando la mujer "realizaba trabajos de vendimia".

A su vez, ha anticipado que, en el domicilio de la desaparecida, "no se han encontrado signos que indicaran una hipótesis" de lo ocurrido y "estaba todo en orden". La mujer, de 58 años de edad, responde al nombre de Sara Silva Alonso, tiene el pelo corto y rubio y los ojos azules.

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