Playa de A Lanzada (Pontevedra)

El Centro Integrado de Atención ás Emerxencias (CIAE) 112 Galicia activó el dispositivo de respuesta, movilizando a Salvamento Marítimo, el Servizo de Gardacostas de Galicia, el Grupo de Emergencias Supramunicipales (GES) de O Grove y Sanxenxo, así como a la Policía Local de O Grove. También participaron los efectivos del servicio de salvamento y socorrismo de la playa y fue desplazado un helicóptero medicalizado con base en Ourense para prestar asistencia avanzada.

 

A pesar de la rápida y coordinada intervención de todos los equipos de emergencia, el hombre falleció en la misma playa, donde se certificó su muerte tras intentos infructuosos de reanimación. Fuentes próximas al caso señalan que la causa podría estar relacionada con un episodio súbito de salud o un desvanecimiento mientras estaba en el agua, aunque se esperarán los resultados de la autopsia para confirmarlo.

 

El Ayuntamiento de O Grove expresó su consternación por el fallecimiento y resaltó la profesionalidad y rapidez de respuesta de los servicios de salvamento, subrayando la importancia de extremar las precauciones en las zonas de baño, especialmente para personas mayores, quienes son más vulnerables a complicaciones asociadas a la exposición al agua fría y otros factores ambientales.

 

La playa de A Lanzada, uno de los arenales más extensos y concurridos de la provincia de Pontevedra, cuenta con servicio de socorrismo durante el verano, pero dada su extensión, la vigilancia total es compleja. La tragedia pone de relieve la necesidad de la responsabilidad individual y la prudencia en el baño, sobre todo para las personas mayores o con problemas de salud. Hay que recordar que tanto Galicia como España están viendo como se disparan las muertes por ahogamiento. El perfil típico del ahogado es precisamente el de un varón de edad madura, como el fallecido hoy en A Lanzada.

 

Este incidente se suma a un verano marcado por varios rescates y ahogamientos en Galicia, lo que ha llevado a insistir en las recomendaciones de los servicios de socorrismo, tales como respetar las banderas de señalización, evitar baños solitarios o en zonas no vigiladas y mantener una progresiva adaptación al agua para evitar cortes de digestión o síncopes.

 

Tras la confirmación del fallecimiento, la Policía Local y la Guardia Civil están a cargo de las diligencias e investigaciones pertinentes. 

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