El Gobierno gallego ha iniciado la semana con un cambio de batuta, aunque de carácter temporal. El presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, ha comenzado un período de descanso de una semana, cediendo las responsabilidades de su cargo a su hombre de confianza, el vicepresidente primero y conselleiro de Presidencia, Xustiza e Deportes, Diego Calvo. La decisión, que busca compensar las vacaciones familiares que Rueda canceló abruptamente en agosto, se ha hecho efectiva a través de un decreto publicado a primera hora de este lunes en el Diario Oficial de Galicia (DOG).
La primera tarea de Calvo como presidente en funciones ha sido presidir la reunión semanal del Consello de la Xunta, el encuentro que habitualmente marca el arranque de la agenda política del Ejecutivo autonómico. Con este acto, se escenifica la total asunción de las competencias por parte del conselleiro, quien se encargará del despacho ordinario de los asuntos de la Presidencia hasta el regreso de Rueda. Fuentes de la Xunta han enmarcado esta ausencia como un paréntesis sin actividad pública para el titular del gobierno.
La razón de este descanso en pleno inicio del curso político se remonta a la grave crisis de incendios forestales que golpeó Galicia durante el verano. Alfonso Rueda, que había iniciado su periodo vacacional en torno al 5 de agosto con la previsión de reincorporarse en septiembre, se vio forzado a volver a la tarea en torno al 14 de agosto.
Durante aquella crisis, el mandatario gallego no solo gestionó la emergencia sobre el terreno, sino que también protagonizó sonadas críticas hacia otros dirigentes del ámbito nacional. Rueda reprochó públicamente a miembros del Gobierno central, con una alusión directa a la ministra de Trabajo, la gallega Yolanda Díaz, que no interrumpiesen sus propios periodos de descanso ante la gravedad de la situación.
Un otoño marcado por la gestión post-incendios
El presidente en funciones asume el mando en un momento clave para la política gallega. Sobre la mesa del Consello de la Xunta se encuentran asuntos de gran calado, como la elaboración de los presupuestos de la comunidad para el próximo ejercicio, la canalización de las ayudas para la recuperación de las zonas devastadas por el fuego y el despliegue de las políticas anunciadas para el nuevo curso.
Se espera que Alfonso Rueda se reincorpore a su despacho en San Caetano a principios de la próxima semana para retomar su agenda pública. La elección de Diego Calvo como sustituto no es ninguna sorpresa, sino la confirmación de una jerarquía consolidada dentro del Gobierno gallego. Calvo ya ha ejercido como presidente en funciones en anteriores ocasiones, principalmente para cubrir las ausencias de Alfonso Rueda durante viajes institucionales fuera de España.