El Ayuntamiento de Ourense retirará las placas franquistas de las viviendas de protección oficial de la ciudad. Así lo ha decidido este viernes el pleno con los 16 votos a favor de Democracia Ourensana (DO), PSdeG y Ourense en Común (OUeC) y la abstención del PP, que apostaba por realizar informes técnicos y jurídicos antes de quitar las placas.


Todos los portavoces municipales han coincidido en que se trata de una "obligación" del Ayuntamiento, a raíz de la Ley de Memoria Histórica. La única desavenencia se ha producido en cómo se tiene que realizar la retirada de estas placas.


Por parte de la oposición se ha instado a una retirada inmediata, mientras que el PP ha presentado una enmienda que reclama "informes técnicos y jurídicos" previos y "recabar la opinión pública" antes de proceder a la retirada de estos símbolos.


La concejala Belén Iglesias ha explicado que su formación apuesta por este sistema con la intención de "evitar conflictos" como los que ha señalado se produjeron en otras localidades españolas. En concreto se ha referido a la ciudad vasca de Vitoria, "donde se quisieron retirar 163 placas y finalmente se quitaron 61".


Ante la negativa del resto de grupos el PP se ha abstenido en la votación final, aunque ha reiterado su "censura" a "cualquier tipo de régimen totalitario, a las denuncias y crímenes de la Guerra Civil por ambos bandos y los que tuvieron lugar durante el Franquismo".


OUEC RECHAZA "RODEOS"


La portavoz de Ourense en Común, Ledicia Piñeiro, ha justificado la negativa a aceptar cualquier enmienda por considerar que "es dar un rodeo" y supone "no decir de frente que no se quieren símbolos fascistas en las calles".


Mientras, el portavoz de Democracia Ourensana, Gonzalo Pérez Jácome, ha apoyado la propuesta a pesar de calificarla como "absurda" al considerar que "es lo que dice la propia Ley y lo que habría que haber hecho es mandar un requerimiento al alcalde para que la cumpla".


El socialista José María García Tejerina ha criticado la "tardanza" a la hora de retirar los símbolos fascistas de las ciudades españolas a pesar de la Ley de Memoria Histórica, de las sentencias del Tribunal Supremo y de los informes del Consejo de Europa que "piden a España una reparación a las víctimas".


"En Ourense en estos momentos quedan pocos vestigios pero es necesario retirar los que aún quedan, como las placas del Ministerio de Vivienda en las casas de protección oficial", ha defendido.

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