Una "competición especial". Foto: @gomez_sergi twitter


Tras dos semifinales perdidas de forma consecutiva, el Celta vuelve a la competición copera. Y lo hace contra el Eibar, un equipo en horas bajas, pero que se estrena en su estadio.


Aunque el responsable del banquillo celeste en las dos ocasiones anteriores era Berizzo, Unzué también declaró sentir la Copa del Rey "como una competición especial y en este caso tiene una importancia mayor porque en los últimos años al Celta se le ha dado bien".


Así, aunque el entrenador anunció "algunos cambios" en el once, afirmó que quiere a toda la plantilla "enchufada", por eso solo lleva a Brais Méndez del filial.


En Ipurúa, el dinero recaudado en la taquilla irá destinado a los afectados por la ola de incendios que afectó a Galicia la semana pasada. Un gesto del Eibar que el Celta ha respondido rechazando las invitaciones al partido y pagando por su asistencia.


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