Stellantis podría llevar los eléctricos pequeños a Marruecos o Portugal, privando de ellos a Vigo y Zaragoza

Según fuentes conocedoras de las negociaciones entre Moncloa y la multinacional citadas hoy por Cinco Días,  la empresa no las tiene todas consigo. De hecho, se alude al nerviosismo y a las prisas por saber qué subvenciones llegarán.

Es más, el artículo señala como posibles competidores para llevarse el nuevo sistema de producción de coches eléctricos a las plantas de Portugal, Marruecos, donde acaba de anunciar inversiones para duplicar la producción, o Hungría.

Hay que señalar que cuando visitó la fábrica lusa de Mangualde, el CEO Carlos Tavarés, explicó que una nueva factoría de baterías se construiría en la Península Ibérica, sin especificar en qué Estado.

En teoría, las aspiraciones españolas eran que la producción de baterías fuese a Zaragoza. Allí se fabricarían las pilas para los nuevos modelos a producir en Zaragoza y también en Balaídos.

Sin embargo, en la primera convocatoria del Perte, el proyecto de Stellantis, recibió muchas menos subvenciones de las solicitadas. Le concedieron unos 55 millones, cuando esperaba unos 300.

Desde la desilución del primer Perte, el grupo ha metido más y más presión a Moncloa para que financie sus vehículos pequeños y  compactos. Por ejemplo, Tavares ya ha anunciado qué modelos producirán los próximos años en plantas de Portugal, Italia o Reino Unido pero no en la de Balaídos. La Xunta, gobernado por el PP, ha contribuido a aumentar la presión sobre el Ministerio de Indutria para adujudique los fondos necesarios de la sección B del Perte VEC II.

En teoría, el anuncio se esperaba después de la firma del nuevo convenio de la factoría, pero ha pasado un mes desde aquello y la compañía sigue guardando silencio, a la espera de la resolución de Moncloa. Fuentes sindicales consultadas hoy por Galiciapress indican que los sindicatos siguen sin datos oficiales sobre qué nuevos modelos se producirán.

En ese contexto hay que interpretar las alusiones hoy en la prensa económica al nerviosismo de la compañía y a la posibilidad de llevar esos vehículos a otros estados. Con todo, hay que considerar también que, en teoría, las plantas españolas son las más productivas entre las que aspiran a la nueva plataforma y Balaídos es, de lejos, la de mayor tamaño.

En Europa, Stellantis, en cuya matriz está PSA Peugeot Citroën, los compactos y turismos 100% eléctricos se producen en casa, en el norte de Francia. Con todo, el aumento de la demanda indica que finalmente el resto de las fábricas también se pasarán a esta motorización. La cuestión a decidir a qué Estado le ha llegado el turno.

Stellantis tiene un historial de utilizar ayudas públicas para desarrollar nuevas plataformas. Por ejemplo, la plataforma de las furgonetas K-9, que es la base de la mayoría de los modelos de Balaídos, se benefició de 22 millones de ayudas de la Xunta y también de otras subvenciones del Estado.

En las condiciones de esas ayudas, se especificaba que la compañía se comprometía a desarrollar exclusivamente los trabajos en Balaídos. Así fue inicialmente, Vigo fue la primera factoría en fabricar las furgonetas eléctricas e híbridas en España, lo que le ayudó a ser la líder del mercado eléctrico en este sector (con un 35% de cuota aproximadamente). 

Una vez puesta en marcha en Galicia, Stellantis exportó la tecnología de la plataforma de las K-9 a una factoría del Reino Unido, a donde tuvieron que emigrar algunos de los técnicos implicados en el desarrollo inicial subvencionado en Galicia.

La capacidad de presión de Stellantis sobre los gobiernos de Galicia y España es importante. La multinacional produce, aproximadamente, el 40% de los vehículos que fabrica en España, que a su vez es la segunda mayor productora del Continente.

Stellantis posee en todo el globo un cuadro de personal de más de 200.000 empleados, de los que unos 12.000 están en España. De ellos, unos 6.500 trabajan en la factoría de Balaídos, el principal empleador privado de Galicia.

En los últimos días, el PSOE, el partido en el Gobierno en España, ha lanzado mensajes tranquilizadores sobre el Perte, pero sin concretar. Por ejemplo, la ex-ministra y cabeza de lista del PSdeG a las elecciones gallegas por la provincia de Pontevedra, Elena Espinosa, dijo el viernes que que “a economía de Vigo, o Grupo Stellantis, a automoción en xeral, así como os sectores naval, da pesca e a conserva, terán centos de millóns a través dos Pertes”.

El candidato a la Xunta, Xosé Ramón Gómez Besteiro, por su parte, defendió la llegada de la plataforma STLA Small de Stellantis a Vigo. Así las cosas, las listas socialistas se apuntarían un tanto si el Ministerio de Industria resuelve segunda convocatoria del Perte antes del 18 de febrero, día de las elecciones gallegas. Por las informaciones que salen de las oficinas de Stellantis, la multinacional lleva la espera de la resolución con ansia.