Fillas de Cassandra, cantareiras modernas: "Ponemos en valor a las informantas y, sobre todo, su memoria"

Debutaron en 2023, pero cuesta recordar cómo era la escena gallega antes de que la pusiesen patas arriba las Fillas de Cassandra. A María SOA, una de las dos patas de esta formación junto a Sara Faro, todavía le cuesta procesar todo lo vivido en este tiempo. Han sido más de dos años de gira constante, días llenos de conciertos y horas de carretera que dan para pensar en todo. Toda esa experiencia que ofrece el reloj las ha llevado hasta ‘Hibernarse’, una nueva etapa en Fillas de Cassandra después de debutar con ‘Acrópole’ y darle una vuelta de tuerca al show con ‘ÚltimasDionisíacas’. 

En este nuevo ciclo, en forma de EP y de muchas otras cosas que integran esta fase en la que avanzan en su sonido propio, la intención era “buscar las medidas para un nuevo traje”, como un proceso con el que “experimentar con nuestras voces, con la producción de la música y ver cómo recomponernos”. 

“UN RECLAMO A LA PAUSA”

En un trabajo donde el tiempo es el elemento central, resulta un misterio descubrir de dónde sacan el tiempo las Fillas de Cassandra para componer, para ensayar, para actuar, para seguir formándose… “En estos dos años se construyó ‘Hibernarse’. Salieron cuatro como un pequeño EP salido de un pequeño camerino perdido en Marruecos, en la furgoneta de gira o espacios en soledad entre concierto y concierto”, admite María, consciente de que en un mundo que gira a alta velocidad resulta complicado encontrar la dedicación y el mimo necesario para sacar adelante proyectos tan cuidados como este último.

“Pretende ser un reclamo a la pausa, al tiempo y al espacio que necesitamos para hacer las cosas con tranquilidad, con la calma que hace falta en todos los procesos artesanales, y hacer música también lo es de alguna forma, aunque no sea tangible”, reflexiona, sin esconder que es también la base de un proyecto mayor que madurará y tomará forma en los próximos meses.

Con este trabajo también se hace más grande el universo de Fillas de Cassandra, que trasciende más allá de la música y permea a cuestiones más estéticas, como el vestuario o incluso joyas hechas a mano. Estos elementos han estado siempre presentes en su trayectoria, pues la producción y la escenografía es otro de los puntos que han cuidado siempre desde su irrupción, pero ahora tratan de llevarlo a un nuevo nivel. 

Fue esa necesidad de “tener el foco abierto” la que les permitió hacer de este trabajo algo más allá de lo puramente musical. “Con ese reclamo a los procesos artesanales pensamos en intentar hacer algo tangible. Justo apareció ‘Toda Frágil’ con la que hicimos las piezas de cristal, formas de llevar al textil este ‘Hibernarse’ y el fanzine, que era una forma de acercar nuestra intimidad de los procesos que se quedaron en el camino y todo lo que queríamos contar y que no caben en nuestras canciones”, indica. 

DE VIGO A RABAT

Lo que resulta evidente para los fans es ese proceso de evolución que ha transcurrido entre su álbum debut, con el que el dúo vigués irrumpió con fuerza en la escena gallega con un aggiornamento de la música tradicional del país, hasta esta nueva etapa, pasando por el anterior espectáculo con el que perseguían dar un giro a su estilo incluyendo un sonido más electrónico. 

“Es distinto construir desde la experiencia de decir qué es lo que quieres tocar que no hayas hecho todavía. Eso nos llevó a muchos sitios y en el EP hay temas que nos llevan de vuelta a nuestras raíces, a construir de un lugar más orgánico, pero también canciones que invitan al baile, a gritar a los cuatro vientos, algo que sentimos muy nuestro”, considera. 

Esa capacidad para seguir buscando fórmulas nuevas sorprende más si cabe considerando que desde la primavera de 2023 no han tenido un solo momento de respiro. Además de recorrer Galicia por los cuatro costados, María y Sara llevaron su música más allá de Pedrafita, a salas y festivales de España, pero también presentan sellos en sus pasaportes por actuaciones en Bélgica o Marruecos. 

Echando la vista atrás, María dice no poder quedarse con un momento concreto de todo lo vivido, pero sí destaca la experiencia de “vivir con el público todo el proceso, cómo nos acompañaban concierto a concierto”, con el ejemplo de su último concierto en Madrid, en la Sala But, donde colgaron el cartel de no hay billetes. 

“Fue impactante llegar allí y, al preguntar cuántos eran de Galicia, descubrir que muchos ya habían estado en nuestro concierto del año pasado y se habían traído a amigos de fuera que se sabían las canciones enteras y trataban de hablar en gallego. Ahí ves a qué lugares puede llegar la música sin saberlo”, rememora.

LAS CANTAREIRAS MODERNAS DE APPLE MUSIC

Precisamente esa capacidad para llegar a los rincones más insospechados entra ahora en una nueva dimensión después de que Apple Music confirmase a Fillas de Cassandra dentro de su programa Up Next, una iniciativa de la que han formado parte artistas de la talla de Billie Eilish, Jhay Cortez, Guitarricadelafuente, Bad Bunny, Judeline o Alcalá Norte. Este impulso puede llevar a las olívicas a una nueva órbita hasta ahora insospechada, pues todavía no han terminado de aterrizar del todo “la magnitud” de este paso en su carrera del que dicen sentirse “muy honradas de estar en esta lista”.

“El trabajo hecho se ve reflejado en la apertura de espacios como este que te animan a seguir, porque el cansancio existe y los reconocimientos de este tipo son increíbles”, valora María SOA, que encuentra también aliento en oportunidades como la de tocar con Caamaño&Ameixeiras, con las que crearon ‘Arderse’, uno de los temas más alabados del EP.

“Cuando empezamos a componer el tema fue como si las escuchásemos. No podíamos terminar el tema sin ellas y teníamos la esperanza de que les apeteciese participar. Cuando nos dijeron que sí pudimos compartir con ellas el estudio, el proceso de componer y conversaciones profundas de lo que supone el paso del tiempo para cada persona, porque a cada uno le toca en lugar muy íntimos”, destacan las Fillas, que dicen sentirse “afortunadas” de poder vivir esa experiencia con un grupo “al que admiramos”.  

La admiración es reciproca por parte de Sabela y Antía, que sin saberlo en su momento jugaron un papel fundamental en la trayectoria de Fillas de Cassandra. Justo cuando las viguesas despegaban y despertaban expectación, se abrió ante ellas la posibilidad de participar en el proceso de selección para acudir a Eurovisión, una decisión que las obligó a meditar cuál era el camino que debían tomar. Fue en un directo de Caamaño&Ameixeiras donde coincidieron en que el camino escogido, tal vez menos meteórico y mediático, pero sí más pausado y hermoso, era el adecuado para sus carreras.       

“Lo recuerdo y se me pone la piel de gallina”, confiesa María, que recuerda que “fue en Manresa, en un teatro. Después de ese concierto quedé fascinada. Era ahí donde quería estar: en esa preocupación por las canciones, porque fuese orgánico… Pero nunca pensamos en hacer una colaboración con ellas, no había coincidido. Es bonito recordarlo de esta manera”. 

Sara y María, María y Sara son, con otros grupos, como por ejemplo Tanxugueiras (con la que también han colaborado en estos dos años), las cantareiras modernas, una figura que este 17 de mayo tiene su día grande al ser ellas las homenajeadas por el Día das Letras Galegas. Fillas de Cassandra forma parte de esa tradición que recogieron sus madres y sus abuelas antes que ellas, pasando de boca a boca las historias que ahora protagonizan sus canciones. 

“Resulta cómico que, justo hoy, tengamos que estar en Madrid”, dice María entre risas, pues en la agenda tienen marcado una actuación junto a Tremenda Jauría y La Raíz. “Es increíble poder estar allí y con ese altavoz poder decir en el Día das Letras y llevar nuestra lengua hasta esos espacios”, asegura.

“Es importante en este día poner en valor a todas estas informantas y, sobre todo, su memoria, que de alguna forma está presente en ‘Hibernarse’, como en ‘Quebrantarse’ con Comandante Moreno y Severina Murias que cantaba durante siete minutos sin olvidarse de nada. Esa memoria es más importante en este mundo de consumo rápido e individualista”, medita.

DESCANSO MERECIDO

El de Madrid es uno de los pocos compromisos que quedan anotados en el calendario de Fillas de Cassandra, que todavía dejan algún anuncio en la nevera, por lo que invitan a estar muy atentos a sus redes sociales. No obstante, no será el tour sin descanso de los dos años anteriores, ganándose a pulso un tiempo para descansar.

“Algo saldrá, alguna colaboración… Pero en cuanto a conciertos tenemos que parar. No será un tiempo sin hacer nada, habrá mucho trabajo, pero de ese que se hace fuera de cámara”, garantiza. Si fueron capaces de levantar ‘Hibernarse’ sin tiempo para hacerlo, ¿de qué serán capaces las Fillas de Cassandra sin someterse a la tiranía del reloj de arena? Solo el tiempo lo dirá, y tienen de sobra.