Crisis PSdeG: madre detalla presunta oferta de sexo por trabajo; Caballero critica a un Besteiro que planea denuncia contra Cuatro

La crisis desatada en torno a la figura del presidente de la Diputación de Lugo, José Tomé, por presuntas conductas de acoso sexual, vivió anoche un nuevo capítulo. El espacio televisivo Código 10 contó con el testimonio directo de la madre de una de las afectadas, quien dibujó un escenario de desprotección institucional ante la dirección del PSdeG cuando intentó alertar de lo que estaba sucediendo. Unas acusaciones que José Ramón Gómez Besteiro y su equipo niegan hasta el punto de anunciar medidas legales contra el programa de Cuatro.

La emisión, que había generado una enorme expectación en los círculos políticos de Galicia, no aportó nuevas pruebas documentales definitivas más allá de las ya conocidas, más allá del morbo de cómo, presuntamente, José Tomé se valió de su posición de poder para acosar a una mujer. Ahora bien, el programa sí ofreció un relato humano muy crítico con la gestión de la crisis por parte de la ejecutiva. 

La progenitora de la joven lucense narró cómo su hija, que se encontraba preparando unas oposiciones al Ayuntamiento de Monforte, fue citada por el todavía alcalde de la villa . Según esta versión, el regidor le habría insinuado que no necesitaba estudiar tanto si accedía a sus pretensiones, llegando a verbalizar una propuesta de intercambio sexual a cambio de una plaza laboral, algo que la joven rechazó categóricamente alegando sus principios. . "Le dijo que no hacía falta estudiar porque entraba en la oposición si a él le salía de los huevos", concretó antes de señalar que  "Le dijo: 'si quieres trabajar en el Ayuntamiento de Monforte [de Lemos] te tienes que acostar conmigo'. Mi hija quedó noqueada".  Según su relató, el político fue insistente en sus pretenciones: "Cuando mi hija se negó, la agarró del brazo 3 veces y en una tercera ella le dio un codazo para que la soltara y al día siguiente le escribió un WhatsApp. Le dijo, con una autoridad tremenda: 'el jueves comemos a tal hora'"

Lo que más ha escocido en las filas socialistas no es solo la acusación contra Tomé, que ya era conocida, sino el cuestionamiento directo a la respuesta de la dirección autonómica. La madre detalló que el pasado 7 de octubre se reunió con el secretario general, José Ramón Gómez Besteiro, para exponerle la gravedad de los hechos. 

Según su testimonio, la respuesta inicial fue de cierta impotencia, derivándola a la secretaria de Organización, Lara Méndez. La mujer sostiene que, pese a la gravedad del relato, sintió que sus advertencias caían en saco roto y que la maquinaria del partido solo se activó realmente cuando ella amenazó con hacer público el escándalo, contradiciendo así la versión oficial de que el PSdeG siempre estuvo del lado de las presuntas víctimas. 

Hay que tener en cuenta, y esto no es discutible, que el partido solo logró que Tomé abandonase parte de sus cargos una vez que el escándalo saltó a la prensa al ser filtrado por las denunciantes. También es evidente que Besteiro inicialmente negó saber nada sobre las denuncias contra Tomé, para después reconocer que sabía de ellas hace semanas.

Choque de relatos en la cúpula gallega

Asi, la narrativa expuesta en el programa de Cuatro sitúa a los dirigentes del PSdeG en una posición delicada. Tras el encuentro con Besteiro, la madre se reunió con Lara Méndez, también lucense y número dos del partido en Glicia,  y, días más tarde, con Pilar García Porto, responsable de organización en la provincia de Lugo.

Según relató ante las cámaras —y a la periodista subdirectora del programa y exparlamentaria socialista Noelia Otero—, aunque recibió palabras de comprensión y reconocimiento de la gravedad del asunto por parte de los dirigentes socialista, la respuesta final, en términos prácticos, fue decepcionante. Le trasladaron que, dado que José Tomé negaba tajantemente las acusaciones, el margen de maniobra del partido era nulo. Esta postura de "palabra contra palabra" generó en la familia una profunda sensación de indefensión y soledad.

El partido contactó posteriormente con la familia vía correo electrónico para reiterar el apoyo de la formación y recordarles la existencia de canales internos seguros, animándoles a formalizar la denuncia. 

El problema para el PSdeG es que el caso de este presunto ofrecimiento de sexo por trabajo de funcionaria puede no ser el único. El programa conducido por Nacho Abad fue más allá, asegurando que su equipo tiene constancia de al menos seis denuncias presentadas a través del canal ético del PSOE y otros tantos testimonios adicionales, sugiriendo que el comportamiento del presidente provincial podría responder a un patrón de conducta reiterado en el tiempo y conocido por el entorno político desde hace más de un año. De hecho, la madre denunciante asegura que Besteiro sabía de más denuncias.

Este escenario ha provocado grietas visibles en la histórica unidad del partido en Galicia. Figuras emblemáticas del socialismo gallego y expresidentes de la Xunta como Emilio Pérez Touriño y Fernando González Laxe, junto a Xoaquín Fernández Leiceaga, se han alineado con lo que ya se denomina la "rebelión de las mujeres" dentro del partido, exigiendo contundencia y ejemplaridad. La presión interna crece para que se depuren responsabilidades no solo por los hechos presuntos, sino por la gestión política de la crisis.

La contraofensiva de la dirección socialista

Ante el impacto mediático de estas declaraciones, la dirección del PSdeG ha reaccionado con rapidez y contundencia, emitiendo un comunicado en el que descalifica el tratamiento informativo del programa, tildándolo de campaña de difamación. Desde la ejecutiva gallega subrayan una distinción legal y procedimental clave: afirman que ninguna víctima directa se dirigió a ellos, sino una tercera persona, se supone que la madre que salió en el programa de televisión, y que, desde el primer momento en que tuvieron conocimiento informal el 7 de octubre, la recomendación invariable fue que se acudiera a los tribunales. Niegan rotundamente la inacción y defienden que se hizo todo lo posible, incluido hablar dos veces con Tomé -que negó y niega las acusaciones- dentro del marco legal vigente.

El comunicado oficial insiste en que, al no existir una denuncia formal inicial, no se podía actuar disciplinariamente contra Tomé basándose solo en rumores o testimonios de terceros. La dirección recalca que hasta tres miembros de la cúpula atendieron a la madre en varias ocasiones y exigieron explicaciones al presunto acosador, quien negó los hechos. El argumento central del PSdeG es que, tan pronto como se formalizó una denuncia en el canal interno federal, se activó el protocolo antiacoso de manera inmediata y se solicitó la dimisión de Tomé, demostrando que los tiempos relatados por Besteiro en su última rueda de prensa son veraces y que el partido tiene tolerancia cero.

El enfrentamiento con Cuatro es total. El PSdeG estudia acciones legales contra el programa por lo que consideran una "grosera campaña de desinformación" que daña la honorabilidad de personas que no han sido juzgadas. La formación exige una rectificación y apela a la presunción de inocencia y al rigor informativo en un tema de tal sensibilidad, intentando frenar el desgaste que esta situación está provocando en sus siglas a nivel autonómico. 

Caballero critica a Besteiro y el manifiesto crítico gana apoyos

La falta de reacción política del partido ha generado un fuerte malestar interno entre la militancia Galicia. Cientos de militantes y cargos han expresado su desacuerdo, y cerca de 500 han suscrito el manifiesto promovido por la alcaldesa de A Coruña, Inés Rey. Entre los apoyos destacan los de los expresidentes de la Xunta Emilio Pérez Touriño y Fernando González Laxe. 

En las últimas horas también se ha pronunciado Abel Caballero. El alcalde de Vigo considera que Besteiro reaccionó demasiado tarde y así lo expresó públicamente: “La dirección inicialmente no se equivocó en lo que ahora conocemos, dejando pasar mes y medio sin comunicárselo a nadie”. Hace días que es evidente que Besteiro no cuenta con los apoyos del PSOE de la ciudad de A Coruña, pues Rey ha sido una de las primeras en criticar su respuesta públicamente, aunque no ha pedido su dimisión. 

Las palabras de Caballero indican que tampoco cuenta con el apoyo del PSOE de Vigo, que junto con el de A Coruña es la agrupación socialista de Galicia. Si a esto le unimos que el PSOE de la ciudad de Lugo ha presentado un manifiesto crítico con la gestión de la crisis, el comunicado crítico remitido por parte de los alcaldes de Ourense, se hace evidente que los apoyos políticos a Besteiro dentro del PSOE son endebles.

Por ahora, solo el líder del partido en Santiago de Compostela, Aitor Bouza, habló claramente respaldando a Besteiro y su equipo. Ferraz, principal valedor de Besteiro, por su parte, sigue sin mojarse. Además, se abre un nuevo flanco en la disputa, con el enfrentamiento entre la cúpula del PSdeG y el alcalde de Barbadás, al saltar un caso de presunto acoso laboral contra el edil, que es uno de los críticos con la gestión de la crisis lucense. El político ourensano se niega a dimitir como le ha pedido Besteiro y, a su vez, pide la dimisión de secretario xeral.