Operaciones canceladas en varios hospitales por la huelga en el SERGAS convocada por CESM

Así, por ejemplo, en hospital Álvaro Cunqueiro de Vigo hubo que cancelar cirugías programadas. En Pediatría paró el 80%, en Digestivo sobre el 50%, en Traumatología en torno al 70% y en Anestesia el 70%, lo que implica muchas cirugías canceladas.

 En el CHUO de Ourense solo funcionario 6 de los 16 quirófanos, según los representantes de este sindicato. Según la central, paró el 80% de los que podía hacer huelga, que no estaban obligados a trabajar por los servicios mínimos. 

En el HULA de Lugo hubo tres quirófanos que tuvieron que suspender su actividad. Un centenar de médicos secundó el paro en el hospital, aproximadamente el 15%. El seguimiento en el hospital de A Mariña ha sido mayor, con una cuarta parte de los galenos, aproximadamente, secundando la protesta. 

El paro parece que está teniendo menos seguimiento en los centros de salud que en los hospitales. En el sector es conocido que el punto fuerte de CESM está en los hospitales y tiene menos capacidad de movilización entre médicos de familia y pediatras de los centros de salud. 

Alberto Escobar, delegado de CESM en Ourense, declaró a RNE que "entre los que salían de guardia y los que de servicios mínimos, el seguimiento ha sido del 100%". El sindicalista indica que está siendo la huelga "más histórica" desde que existe el CHUO.

Hay que recordar que la Xunta decretó servicios mínimos del 100% en muchos de las prestaciones sanitarias, como Urgencias . La Consellería de Sanidade no ha facilitado datos de seguimiento por ahora. Consultada por Galiciapress, tampoco ha indicado que los vaya a facilitar.

Por parte del CESM, se destaca la amplia asistencia a las concentraciones convocadas delante de hospitales como el de Orense, Vigo o Lugo. Las primeras imágenes de Vigo muestran a centenares de galenos frente a las puertas del Cunqueiro.

Enrique Fernández Carrera, sindicalista de CESM en Vigo, argumenta que la raíz de la huelga es la gestión "economiscista" del SERGAS. El médico defiende que servicios como la sanidad, la educación o la justicia no pueden gestionarse con ese criterio.

En Ourense, la médica de familia María Montes, que asistió a la concentración, pone el énfasis en la carga de trabajo. La doctora suplica disponer de al menos "10 minutos para cada paciente" para que "podamos atender las urgencias con calma".

¿NEGOCIACIÓN ROTA?

Antes de la huelga, CESM y la Xunta mantuvieron un diálogo. La Administración alega que el 75% de las reivindicaciones del sindicato están cumplidas. La central replica que no es así, lo único que puso sobre la mesa la Consellería de Sanidade fueron promesas, sin fechas concretas para cumplirlas. No hay noticia de que el diálogo continúe.

CESM es el único sindicato convocante. El resto, salvo la CIG, firmó un principio de acuerdo con la Xunta hace unas semanas para tratar de desatascar los serios problemas que arrastra el sistema, sobre todo Atención Primaria (pediatras y médicos de familia).

La situación puede empeorar con ésta y otras huelgas. Hay que recordar que el personal de Povisa de Vigo está llamado a paros parciales a partir del lunes. Es un centro privado, pero también es el hospital de referencia para docenas de miles de asegurados en el SERGAS en comarcas como O Morrazo.

El motivo de las protestas en POVISA es la falta de negociación del convenio. Las reinvidicaciones de CESM son económicas, pero solo en parte. La central entiende que el SERGAS debe dar un profundo giro a su modelo de gestión para tomar medidas de calado, como la jornada laboral de 35 horas semanales.

SERVICIOS MÍNIMOS DEL 100% PARA MUCHOS 

Los servicios mínimos de la huelga en el SERGAS son del 100% en las áreas de urgencias  y las emergencias del 061. Profesionales que atienden partos, operaciones urgentes, UCIs, diálisis, tratamientos oncológicos, reanimación y otras prestaciones vitales tampoco pueden ir a la huelga. 

En Atención Primaria tendrá que haber al menos un efectivo en los centros de cuatro o menos médicos de familia; dos sanitarios en los centros con entre cinco y ocho; tres en aquellos que tengan entre nueve y doce; y cuatro en los que dispongan de 13 o más médicos de familia.