El entrenador de un club deportivo de Vigo, acusado de abuso sexual a una menor y juzgado en la ciudad olívica, ha negado que hubiera motivación sexual en los tocamientos que realizó a una niña a la que preparaba en la modalidad de taekwondo acrobático, y ha justificado esos contactos alegando que se trataba de "trabajos corporales". "En los trabajos corporales se toca mucho", ha argumentado.