El domador que no le pega a los caballos, sino que se hace amigo de ellos, llega a Galicia

Hay otra forma de educar a un caballo, que no pasa por atarlo, taparle los ojos, clavarle las espuelas o usar el látigo.  La doma sin violencia es un saber ancestral que hoy conocemos como doma natural, racional o india. 

Una técnica que tiene por gran referente mundial a Martín Ochateco, famoso en el mundo de los caballos por su inconfundible look de pantalones vaqueros, zapatos cómodos, melena y barba larga; que popularizó en la serie de televisión que le dedicó el conocido canal National Geographic.

Ochoteco en una imagen de la serie que protagoniza en National Geographic

Ochocoteco no comparte la idea de liderazgo. Para él no tiene mucho sentido entrar en un corral siendo de otra especie e imponerse como líder. Busca la confianza y hacerse amigo del animal, crear un vínculo.

Ochoteco visita esta semana Galicia tras seis años sin pisar España, y lo que más le duele es estar mucho tiempo lejos de los veintisiete caballos con los que convive.  De gira por Europa, aterriza en Compostela para impartir en Cepeda (Teo) dos masterclass para profesionales y aficionados del mundo del caballo los días 28 y 29 de julio.

Popularizada por sus amistades cuando comenzaron a recomendarlo a personas adineradas del mundo de los caballos, su técnica se basa en la no violencia. Así, el programa de este fin de semana pasa por hablar de la motivación como el motor del comportamiento equino, el conocimiento y el acercamiento, la corrección de vicios y la importancia del lenguaje corporal humano en la psicología de los animales. A través de estos fundamentos, Martín enseña a gestionar y controlar a los caballos en el día a día, creando una relación entre persona y animal.

Una de las grandes preocupaciones del domador era hacer lo contrario a los gauchos, y no sólo lo ha conseguido, sino que ha conseguido convencer a personas expertas en la materia de que el proceso de domesticación es tan sencillo como inclinar la cabeza sobre la del caballo, esperar una señal del animal o hacerle cierto ruido con los dientes al oído.

Ideó un sistema de seis riendas, cuatro atadas a un bocal que cubre el hocico del equino y dos atadas a un filete, como se llama en Argentina, que se coloca en los dientes y es muy liviano. Sus conocimientos sobre los animales son la base de su método, ya que este método busca cuidar las encías de los caballos, donde tienen una sensibilidad muy grande.

Martín Ochoteco es conocido alrededor del mundo entero, gracias, en parte, a la difusión que ha tenido su método a partir del programa que protagoniza en el canal National Geografic, El domador de caballos. Una serie que podría tener una segunda temporada y rodar algún capítulo en Galicia. 

Zeus, el caballo con el que convive en este episodio, es un gran saltador que fue mal estudiante de una escuela especializada en el aislamiento de caballos:

La doma sin violencia es un proceso progresivo, que comienza por la consolidación de determinadas acciones o situaciones en el cerebro del caballo y que pasa por integrar poco a poco los elementos como los bozales o, más adelante, ensillarlo paulatinamente para que se acostumbre a la presencia del ser humano y se refuercen los vínculos con la persona que se encarga de domarlo.

Aquellos que quieran adentrarse en este fascinante mundo, tienen una cita este fin de semana en Teo.