Ataques cruzados sin tregua: Israel bombardea Teherán después de una oleada de misiles iraníes

En una nueva oleada de enfrentamientos, Israel e Irán han protagonizado un intercambio de ataques cruzados de alta intensidad que, hasta el momento, han dejado al menos 10 muertos, decenas de heridos y múltiples infraestructuras civiles y energéticas destruidas. Entre las víctimas hay varios menores de edad.

Los sistemas antiaéreos israelíes se activaron a primera hora tras el lanzamiento masivo de misiles desde Irán. Los proyectiles impactaron en zonas urbanas del norte y centro de Israel, mientras la aviación israelí bombardeaba objetivos estratégicos en Teherán, incluidos —según fuentes oficiales— el Ministerio de Defensa iraní e instalaciones vinculadas al programa nuclear.

Alerta total: civiles atrapados y menores muertos

El impacto más devastador de los misiles iraníes se ha producido en Tamra, una ciudad del norte de Israel, donde una mujer murió y otras 13 personas resultaron heridas después de que un misil destruyera una vivienda. La ciudad, de mayoría árabe-israelí, carece de suficientes refugios, una situación que su población ha denunciado reiteradamente.
 

Más tarde, fuentes de emergencia confirmaron tres muertes adicionales en Tamra, entre ellas una niña de 13 años y dos mujeres de entre 20 y 40 años. En total, el balance provisional eleva a al menos 10 las víctimas mortales, dos de ellas menores, mientras los servicios de rescate continúan buscando a hasta 35 desaparecidos entre los escombros.

Otros impactos se han registrado en las localidades de Bat Yam y Rehovot, en la periferia de Tel Aviv, donde seis personas más han perdido la vida, entre ellas dos niños de 0 y 8 años y dos mujeres de 69 y 80 años, según informó el servicio nacional de ambulancias, Magen David Adom (MDA). Más de 200 personas resultaron heridas, y una veintena de civiles sufrió ataques de pánico.

"Operación Promesa Verdadera III"

La agencia oficial iraní IRNA ha confirmado el lanzamiento de “decenas” de misiles como parte de la segunda oleada de la llamada "Operación Promesa Verdadera III", ejecutada desde bases militares en Shiraz, Kashan, Qom y Lorestan. Estas acciones, según Teherán, son una respuesta “proporcionada y defensiva” a los ataques israelíes de las últimas semanas.

Las Fuerzas de Defensa de Israel han reaccionado publicando vídeos en los que se ven trazadoras y explosiones en el cielo nocturno, asegurando que “millones de israelíes corren a los refugios”, especialmente en las regiones del norte.

“La defensa no es hermética. Las órdenes del Comando del Frente Interior deben ser seguidas estrictamente”, advirtió el Ejército israelí a través de su canal oficial en Telegram.

Bombardeos intensos en Teherán y en el sur de Irán

En paralelo a la respuesta defensiva, Israel ha bombardeado objetivos en la capital iraní, en una de las operaciones más audaces desde el inicio del conflicto. La Fuerza Aérea israelí ha informado de una “oleada de ataques a gran escala” sobre Teherán, incluyendo —según aseguran— la sede del Ministerio de Defensa e infraestructuras del programa nuclear iraní.
 

El Ministerio de Petróleo de Irán confirmó que un depósito de combustible en Shahran, a las afueras de Teherán, fue atacado por misiles, aunque aseguró que “la situación está bajo control” y que la cantidad de combustible almacenada “no era significativa”. También se han reportado explosiones en el campo petrolero de Pars, en la provincia de Bushehr, al sur del país.

“Teherán está ardiendo”, declaró el ministro de Defensa israelí, Israel Katz, reiterando que “si continúan los ataques desde Irán, arderá Teherán con más fuerza”.

Objetivos nucleares en el punto de mira

Pasada la medianoche, Israel afirmó haber atacado objetivos relacionados con el proyecto nuclear iraní, acusando a la República Islámica de ocultar intenciones armamentísticas bajo estructuras civiles.
 

“Hemos atacado centros clave del proyecto nuclear. El régimen ha estado ocultando su infraestructura militar bajo paraguas civiles. Hoy hemos puesto fin a parte de ese engaño”, publicó el ejército israelí en la red social X (antes Twitter).

Reacciones y preocupación internacional

Varios gobiernos occidentales han convocado reuniones de emergencia. Estados Unidos, Francia y Alemania han pedido “contención inmediata”, y la convocatoria del Consejo de Seguridad de la ONU parece inminente. La ONU ha advertido que este intercambio de ataques cruzados podría convertirse en un punto de inflexión irreversible si no se actúa diplomáticamente.

Mientras tanto, la población civil —tanto en Israel como en Irán— vive en un estado de shock, pánico e incertidumbre, atrapada entre alarmas de bombardeo, refugios improvisados y el miedo constante.

¿Una escalada sin fin?

El intercambio de ataques cruzados entre Irán e Israel abre un escenario de guerra abierta que podría desestabilizar no solo la región, sino el equilibrio global. La posibilidad de una implicación indirecta de otras potencias, como Rusia o Estados Unidos, no puede descartarse, y las próximas horas serán decisivas para saber si este nuevo episodio es un hecho aislado o el inicio de un conflicto regional a gran escala.