Carlos Mazón acepta que Vicent Mompó asuma el liderazgo del PP valenciano con consenso interno

En un momento decisivo para el futuro del Partido Popular en la Comunitat Valenciana, el nombre de Vicent Mompó se consolida como la apuesta de consenso para pilotar la próxima etapa política de los populares valencianos. Tras días de incertidumbre y reuniones internas, la figura del actual presidente de la Diputación de Valencia y del PP provincial emerge con fuerza como punto de unión entre las distintas sensibilidades del partido.

Reunión clave y búsqueda de unidad

Fuentes del PPCV confirmaron a Europa Press que el pasado viernes se celebró una reunión estratégica en la que participaron el secretario general, Juanfran Pérez Llorca, y los tres presidentes provinciales: Vicent Mompó (Valencia), Toni Pérez (Alicante) y Marta Barrachina (Castellón). El encuentro, descrito por dirigentes presentes como “determinante”, sirvió para abordar la situación del partido y los últimos acontecimientos que han afectado a la dirección autonómica.

Durante la sesión, los representantes provinciales pusieron sobre la mesa la necesidad de ofrecer una imagen de fortaleza y coordinación ante los últimos episodios de tensión pública. Según trasladaron fuentes internas, “era el momento de demostrar madurez política y cohesión orgánica”, y el acuerdo en torno a Mompó se interpretó como un paso decisivo hacia esa estabilidad.

El contexto: semanas de tensión y desgaste

Las dos últimas semanas han sido particularmente difíciles para el PPCV. La gestión de la DANA del 29 de octubre de 2024, que dejó graves daños e importantes críticas en varias comarcas valencianas, provocó un desgaste notable en el equipo de Carlos Mazón. A esa situación se sumaron los incidentes ocurridos en el funeral de Estado por las víctimas de las inundaciones, donde familiares de fallecidos increparon al president de la Generalitat con gritos como “Mazón, cobarde” y “dimisión”.

Estos episodios, ampliamente difundidos en medios nacionales, abrieron un debate interno sobre la necesidad de reforzar la dirección del partido y redefinir el liderazgo político en la Comunitat. “Era imprescindible encarar una nueva etapa con una figura que generase consenso real”, comentan desde el entorno popular.

Mompó, la figura de consenso

En ese contexto, el nombre de Vicent Mompó se consolidó como el más idóneo para representar la renovación sin ruptura. Con una trayectoria marcada por la gestión institucional y un perfil dialogante, el dirigente valenciano ha logrado el apoyo de las tres direcciones provinciales, un hecho poco habitual en la estructura del PP valenciano.

Desde la dirección autonómica se trasladó a Génova que Mompó es el candidato que concentra “el mayor nivel de acuerdo y respeto interno”. La propuesta, según las fuentes consultadas, fue recibida con satisfacción por parte de la dirección nacional, que valora especialmente el consenso logrado en torno a un mismo nombre.

Mazón, alineado con la decisión

Aunque Carlos Mazón no estuvo presente en la reunión, fuentes del partido indican que el actual president “está plenamente alineado” con el acuerdo alcanzado. La decisión, según los mismos interlocutores, se ha producido en un clima de respeto y coordinación, y no como una imposición ni un movimiento precipitado.
 

A día de hoy, no se ha fijado una fecha para el posible relevo, pero el escenario más probable es que el proceso se articule de manera ordenada y con el aval de todas las estructuras provinciales. “Solo el president sabe cuál será su futuro inmediato”, subrayan desde el entorno de Mazón, aunque admiten que la figura de Mompó cuenta con su respaldo implícito.

Una nueva etapa en el horizonte del PPCV

La consolidación de Mompó como candidato de consenso podría suponer el inicio de una nueva fase en el PPCV, caracterizada por un liderazgo más territorial, con mayor implicación de las diputaciones y una vocación de cercanía institucional. Analistas internos señalan que su perfil pragmático y su experiencia al frente de la Diputación de Valencia lo convierten en una figura de equilibrio entre las diferentes corrientes del partido.

La dirección popular, por su parte, busca cerrar filas y dejar atrás las turbulencias recientes, proyectando una imagen de unidad que refuerce su posición tanto en el ámbito autonómico como en el nacional. En palabras de un dirigente provincial, “este acuerdo no es solo una decisión orgánica, es una apuesta por la estabilidad política del PPCV”.