Problemas para el baño en Sanxenxo y en la Ría de Pontevedra por carabelas portuguesas

La presencia de carabelas portuguesas no es nueva en la costa gallega. Desde hace varios días, socorristas y equipos municipales han detectado ejemplares vivos y restos en numerosas playas de Sanxenxo, entre ellas Major, Pragueira, Bascuas, Paxariñas, Canelas y Montalvo. La bandera amarilla se ha mantenido en estas playas la última semana, como advertencia a los usuarios. Esta especie, que llega arrastrada por las mareas y los vientos atlánticos, puede causar dolor intenso si sus tentáculos entran en contacto con la piel. Por este motivo, la recomendación más importante es evitar tocar cualquier carabela, viva o muerta, y seguir siempre las indicaciones de los socorristas.

El Ayuntamiento de Sanxenxo insistió cada día en la importancia de no bañarse en las playas afectadas y de informar a los servicios de salvamento en caso de detectar ejemplares en la arena. El personal de salvamento patrulla los arenales y procede a la retirada de los restos encontrados. Hasta este lunes, se ha informado que la mayoría de carabelas eran encontradas muertas y sin tentáculos, lo que reduce el riesgo, aunque no lo elimina del todo. Por eso, aunque la situación es menos peligrosa en muchas zonas, en Montalvo la llegada de ejemplares vivos ha elevado el nivel de alerta y motivado la prohibición total del baño.

En años anteriores, la aparición de carabelas portuguesas en los arenales de las Rías Baixas se ha repetido de forma esporádica, sobre todo a finales de agosto y principios de septiembre. La picadura no suele ser mortal pero puede provocar molestias importantes, reacciones alérgicas y en algunos casos requerir atención médica. El mensaje principal de los expertos y las autoridades es la prudencia: si se produce una picadura, se recomienda lavar la zona afectada con agua salada y acudir lo antes posible a los servicios sanitarios. La alerta se mantendrá activa mientras persista el riesgo en las playas gallegas.