Dimite el responsable de seguridad de las luces de Vigo ante la falta de seguridad

El suboficial del cuerpo de bomberos encargado de la seguridad del espectáculo lumínico de Navidad en Vigo ha presentado su dimisión. Según fuentes de la plantilla recogidas por el diario La Voz de Galicia esta decisión se debe a la constante vulneración del protocolo de seguridad diseñado para manejar el abarrote que afecta a la ciudad en estas fechas.

El núcleo del problema radica en la falta de efectivos suficientes para mantener un retén de cuatro bomberos de manera permanente en la calle Colón, especialmente durante las horas de mayor afluencia. Esta situación, que aún espera solución por parte del Concello, se agrava a medida que se aproxima la Nochebuena y el resto de la temporada navideña.

La preocupación por la seguridad no es exclusiva del cuerpo de bomberos. Alba Novoa, portavoz de la Asociación Vigo Zona Centro, ha expresado su alarma por los atascos y multitudes que complican la vida de los residentes y representan un riesgo para la seguridad y el acceso de servicios de emergencia como las ambulancias.

En un acto simbólico de protesta, el colectivo Vigo Sin Bomberos devolvió la medalla de oro otorgada por el Concello en 2009, en señal de descontento con la gestión del alcalde Abel Caballero. Esta devolución representa una crítica al progresivo desmantelamiento de un servicio vital para la ciudadanía y a la falta de personal, considerada una seria amenaza para la ciudad.

Carlos López Font, portavoz municipal, respondió a este acto señalando que la medalla es un reconocimiento a la historia y servicios de los bomberos de Vigo, y no debe utilizarse con fines partidistas. Por otro lado, el Concello ha iniciado el expediente de contratación de los planes de seguridad para las próximas campañas de Navidad. Sin embargo, este proceso llega tarde, ya que debió concluirse antes de noviembre y no estará listo hasta después de la temporada actual.

La situación se ve agravada por la necesidad de un concurso para seleccionar a la empresa adjudicataria, lo que ha llevado al Concello a contratar a una empresa de manera directa para esta temporada, en medio de presiones de asociaciones de vecinos y demandas de sindicatos policiales por mayor seguridad.

En conclusión, la ciudad de Vigo enfrenta un desafío significativo en materia de seguridad durante su popular temporada navideña, marcada por la dimisión de un responsable clave, la crítica de asociaciones y colectivos, y la gestión tardía de planes de seguridad por parte de las autoridades municipales.