​La planificación deportiva del Celta estalla por los aires tras el compromiso de Luis Campos con el PSG

El club celeste tendrá que compartir a su teórico director deportivo con el PSG, aunque desde la dirección del conjunto gallego todavía no han hecho oficial el acuerdo.

Al Celta le espera un verano movido con muchos fichajes por delante, y tener a Campos en dos frentes, uno de ellos un gigantes como el PSG, no facilita la situación.

Foto: PSG.fr

No hubo sorpresa, solo una pequeña demora. Como anunció Galiciapress hace unas semanas, el no fichaje de Mbappé por el Madrid tenía una dimensión que afectaba a muchos más eslabones del mundo del fútbol, entre ellos el Celta de Vigo, La planificación del club celeste se ve trastocada por la decisión del parisino, que consecuentemente ha provocado la caída de Leonardo, director deportivo, y la llegada de Luis Campos, destinado a reconstruir el Celta, al Parque de los Príncipes.

Campos, confirmado por el Celta, hará también de asesor del PSG. Ser director deportivo de un solo equipo lo incapacitaría para poder hacer malabares con las dos escuadras, además de que en París se rumorea que Zidane, al que persigue el PSG, quiere tener su cuota de decisión en los fichajes del cuadro francés, por lo que Campoos será un mero consejero, aunque el peso de las decisiones recaerá enteramente sobre él.

EL VERANO DEL CELTA EN EL AIRE

De esta forma, el Celta no pierde a un hombre clave en su verano, pero compartirlo tampoco es lo ideal, ya que en Balaídos esperan una transformación profunda, con certa de una decena de fichajes y salidas importantes como la de Denis Suárez, de cara a dar un salto de calidad con respecto a estos años anteriores, ahora que el sistema de Coudet parece asentado en Vigo.

En A Sede no se han pronunciado todavía y el trabajo de Campos y su equipo en la ciudad olívica carece de oficialidad, aunque ya ha sido visto en las oficinas del club celtiña.Pese a todo, distintas informaciones señalan que la sensación que transmite el equipo presidido por Carlos Mouriño es de tranquilidad absoluta y de confianza en la palabra del asesor, que ya habría dejado algunos nombres interesantes y las líneas maestras encima de la mesa de la entidad.