Entre la venta segura y la nueva oportunidad: así recibe Giráldez a los cedidos del Celta de Vigo

Los futbolistas del Celta de Vigo no llevan ni dos semanas de vacaciones pero en las oficinas de A Sede ya se han empezado a mover para confeccionar la plantilla de la temporada 24/25. Con Claudio Giráldez a los mandos, en Balaídos se esperan muchos cambios este verano, pasando por algunas ventas seguras, como la de Larsen, alguna salida que depende de una buena oferta, como la de Bamba, o la posibilidad de pactar el adiós de algunos futbolistas sin hueco, como Cervi. El nuevo entrenador no tiene problemas en mirar a la cantera en busca de soluciones, pero puede que algunos recambios los tenga ya en casa, aunque este año hayan estado lejos de la ría de Vigo demostrando su valía.

LA PATATA CALIENTE

El Celta ha tenido varios futbolistas cedidos este curso, la mayoría buscando los minutos que no podía conseguir con la casaca celeste. Es el caso de Gonçalo Paciência, tal vez el caso más candente que tienen ahora entre manos en los despachos. El portugués, que llegó con cartel de titular, nunca se hizo con un sitio en los esquemas de los preparadores celtiñas. Tanto es así que este verano tuvo que hacer las maletas rumbo a un Bochum que, contra pronóstico, ha logrado la permanencia en la Bundesliga. El cuadro germano remontó en el playout de la Bundesliga a un Fortuna Düsseldorf que había ganado 0-3 en la ida. 0-3 en la vuelta y una agónica tanda de penaltis mantiene a los azules en la élite, pero ya sin Paciência, que ha tenido un papel testimonial. 

Tampoco en Alemania se ganó el puesto y se trae tres golitos de su última experiencia, un bagaje bastante pobre. En Vigo tratan de buscarle novias pero no será fácil porque sus emolumentos son muy altos y no se corresponden con su desempeño. La salida del luso es una prioridad absoluta y pretenden cerrarla este mismo mes para que afecte al límite salarial del verano, por lo que la rescisión del contrato es la opción que gana más peso en estos momentos ante la falta de pretendientes. 

¿UNA NUEVA OPORTUNIDAD?

En Segunda División hubo unos cuanto cachorros celtiñas. El más destacado fue José Fontán, que lideró la zaga del Cartagena. El central es el que mejor ha aprovechado sus minutos en la división de plata y se ha ganado ser uno de los defensores más destacados del campeonato con 37 partidos en su haber, en todos ellos titular salvo en uno y solo tres ausencias (llegó para la tercera jornada del campeonato). Además, sus cuatro goles fueron determinantes para salvación del efesé, con un espectacular segundo tramo del campeonato. 

A Fontán no le faltarán ofrecimientos de Segunda y puede que hasta de primera, pero ahora es Giráldez el que debe evaluar si es jugador para el primer equipo. Ya fue un futbolista con proyección en su día, pero la puerta se le cerró y encadenó cesiones. Con la lesión de Aidoo y puede que con alguna venta en la defensa -Milos Ristic y Manu Sánchez apuntan a abanonar el barco-, el de Vilagarcía podría quedarse este año en Balaídos, en especial por su polivalencia para poder actuar como latreral. 

CUATRO CASOS COMPLEJOS

Más difícil lo tienen los demás. El único que ha brillado, y eso que su desempeño no evitó el descenso del Andorra, ha sido Lobete, que ha cuajado buenas actuaciones en el equipo pirenaico. Cuatro goles y tres asistencias que, sin embargo, no parecen suficientes como para competir con Aspas o Douvikas. Con contrato hasta 2026, si no llega un comprador se apostará por otra cesión que le permita progresar.

Los casos de Carreras, Baeza y De León son más complejos. El delantero uruguayo estuvo cedido primero en Cartagena y luego en Miranda, donde consiguió tener más regularidad, pero en ninguno fue titular. El lateral fue de menos a más con el Elche, pero tampoco se puede decir que la haya roto este curso. Baeza, en cambio, ha pasado casi todo el año en blanco por una rotura del ligamento cruzado. Su valor de mercado se ha precipitado y tiene muy difícil seguir. Por los tres se escucharán ofertas o se valorará, incluso, romper la vinculación que los une.