El gallego Dro Fernández se cuela en la lista de los 60 diamantes en bruto del fútbol mundial

Con sus insultantes 17 años Dro Fernández es hoy en día uno de los nombres propios del Fútbol Club Barcelona. Acostumbrados a sacar talentos de La Masía año tras año, la factoría de fútbol del equipo azulgrana se asemeja más a una churrería que a la auténtica mina de diamantes que hoy nutre el primer equipo culé, con los Lamine Yamal, Gavi, Pau Cubarsí o Balde capitaneando la constante hornada de grandes jugadores con ADN Barça. El último en colarse en ese listado no es otro que el nigranés Pedro 'Dro' Fernández, que acapara titulares, el más reciente procedente de Gran Bretaña.

LA GENERACIÓN DEL 08

Fue el periódico The Guardian el que, en su repaso anual a los mayores talentos del fútbol mundial, colocó al gallego en su pronóstico entre los 60 futbolistas a seguir en los próximos años. De los nacidos en 2008, Dro, que viene de debutar con el primer equipo entrando de titular ante la Real Sociedad y dando muestras del talento que ha encandilado a Hasi Flick, comparte cartel con otro compañero de clase, como Toni Fernández, y el también español Nico Guillén, este en las filas del Sevilla.

El año pasado fueron Cubarsí, Yamal o Marc Bernal algunos de los citados por el medio británico, que en su trabajo de scouting suele marcar la senda de los nombres propios de los próximos años. Un ejemplo lo encontramos en 2019, cuando repasando a los futbolistas nacidos en 2002 puso el foco sobre Pedri, Gvardiol, Doku, Camavinga o Calafiori, jugadores que ya están asentados en la élite como algunos de los mejores futbolistas del momento. También futbolistas como Ilaix Moriba o Bruno Iglesias, en las filas de Celta y Celta B respectivamente, formaron parte de la lista de los nacidos en 2003 en la promoción de Cherki, Wirtz o Musiala.

Dro puede presumir que es el primer gallego desde 2014 que sale en este prestigioso listado que, sin embargo, no es garantía de éxito. Integrar la nómina de grandes talentos de 17 años no es un seguro, ya que muchos de los futbolistas que han salido en esta retahíla de nombres se han quedado en piedras preciosas que nunca llegaron a brillar con la intensidad que prometían en un primer momento. Es trabajo de Dro, y un poco de suerte, alcanzar las cotas que se le presuponen y que, al menos de momento, parecen a su alcance.